ALIADOS. Trump recibió a Netanyahu en la Casa Blanca, en abril pasado.
TEL AVIV, Israel.- Cerca de 600 ex funcionarios del aparato de seguridad israelí, incluidos ex jefes del Mossad, del Shin Bet y altos mandos militares, firmaron una carta dirigida al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para pedirle que presione al primer ministro Benjamin Netanyahu con el objetivo de poner fin a la guerra en Gaza.
“Esta guerra ha dejado de ser justa y está llevando al Estado de Israel a perder su identidad”, advierte Ami Ayalon, ex director del servicio de seguridad interior, en un video que acompaña la misiva difundida ayer por el movimiento Comandantes por la Seguridad de Israel (CIS).
El mensaje va acompañado de imágenes de ex jefes del ejército y la inteligencia, quienes aseguran que el conflicto ha superado sus límites éticos y estratégicos.
En la carta, los firmantes aseguran que Hamas “ya no representa una amenaza estratégica” y que Israel “tiene la capacidad para contener sus remanentes terroristas sin continuar esta guerra a gran escala”. Por eso, solicitan al presidente Trump que utilice su influencia para frenar la ofensiva. “Usted lo hizo en el Líbano. Es hora de hacerlo también en Gaza”, afirman.
El texto cuenta con el respaldo de 550 ex funcionarios, entre ellos tres ex jefes del Mossad, cinco del Shin Bet y tres ex jefes del Estado Mayor. Según CIS, sus miembros acumulan más de 1.000 años de experiencia en seguridad y diplomacia. “Cada una de estas personas participó en decisiones críticas del país”, subraya el comunicado.
Los firmantes también destacan que el ejército israelí ya logró dos de sus objetivos militares: desmantelar las fuerzas armadas de Hamas y su gobierno en Gaza.
Sin embargo, advierten, el objetivo más importante -la liberación de los rehenes- sólo puede alcanzarse mediante un acuerdo. “Perseguir a los últimos altos mandos de Hamas puede esperar. Los rehenes no pueden”, sostienen.
Actualmente, 49 israelíes siguen cautivos en Gaza, según cifras oficiales. El tema volvió al centro del debate público tras la publicación de videos que muestran a algunos de ellos en condiciones físicas alarmantes. Las imágenes provocaron protestas en Israel y renovaron la presión sobre el gobierno. Hamas respondió que los rehenes están recibiendo la misma alimentación que la población de Gaza, que sufre una hambruna por las dificultades para recibir la ayuda que envían ONG y gobiernos.
Muertes por desnutrición
La situación humanitaria en Gaza continúa deteriorándose. El Ministerio de Salud del enclave, controlado por Hamas, reportó que más de 180 personas -incluidos 93 niños- han muerto por desnutrición. Además, se denunció que, ayer, al menos 33 palestinos fueron abatidos por disparos israelíes mientras intentaban acceder a ayuda alimentaria.
“Estamos al borde de la derrota moral”, afirmó Tamir Pardo, ex director del Mossad. En el video, denuncia que “el mundo está viendo lo que hicimos” y que “nos escondemos detrás de una mentira que nosotros mismos creamos”.
Mientras tanto, crecen las divisiones internas en el gobierno y el ejército. El jefe del Estado Mayor, Eyal Zamir, advirtió sobre los riesgos de intensificar la ofensiva terrestre y propuso una estrategia de contención y ataques selectivos para evitar poner en peligro a los rehenes.
Los firmantes de la carta insisten en que es hora de formar una coalición regional e internacional para apoyar a una Autoridad Palestina reformada, capaz de ofrecer a Gaza una alternativa a Hamas.
“El objetivo ahora debe ser claro: detener la guerra, salvar vidas, recuperar a los rehenes y recuperar la dirección moral que Israel ha perdido”.









