20 Julio 2025
La Municipalidad está diseñando, a través de su novel Fiscalía Ambiental, y junto al Concejo Deliberante, una actualización legal de los parámetros que se consideran faltas al ambiente, ya que en la norma vigente se plantean criterios generales. Se trata de una iniciativa que ha de dar perspectivas claras frente a la responsabilidad en la infracción de las normas del cuidado del ámbito comunitario, así como a la forma de controlar y agilizar el sistema de multas, que están aumentando aunque sin precisiones debido a que el parea de juzgados de Faltas se encuentra en proceso de cambio.
Según informó el fiscal Roberto Chustek, el área se encarga de estudiar las faltas que se cometen en el ejido capitalino, que contemplan desde arrojar residuos en la calle o no mantener en condiciones sanitarias adecuadas a los locales comerciales, hasta la emisión de gases de los automotores o los ruidos molestos que generan “contaminación auditiva” que afecta a la vecindad.
La oficina busca profundizar la concientización ciudadana, reforzar la vigilancia en las calles y reajustar la normativa. Las infracciones más comunes son arrojar la basura, sacar los desechos fuera de horario, el abandono de sitios baldíos y situaciones detectadas con algunas empresas que son las grandes generadoras de residuos, según planteó el fiscal.
La Fiscalía opera de oficio y a partir del control de distintas dependencias municipales -como Ambiente, Obras y Servicios Públicos-, y de sistemas como la Brigada Ambiental o el Centro de Monitoreo. Además, se reciben denuncias a través de la página web municipal y de la app Ciudadano Digital, o en la oficina de la Fiscalía, en San Martín 1012.
Todo esto ha derivado en un aumento de las actas y de las multas. Pero la descentralización del Tribunal de Faltas –que ha separado físicamente las dependencias- y la indefinición con respecto a qué área le corresponden determinadas infracciones ha llevado a cierta confusión que es necesario resolver. De los 10 jueces de faltas que hay, cinco fueron a Tránsito (ahora uno es Ambiente), dos a Catastro y tres quedaron en Faltas para todo lo demás. Esta semana hubo una reunión al respecto, en la que se planteó la necesidad de categorizar las faltas. Un azulejo sucio en un local ¿es ambiente o es Catastro y Edificación? Además, todo lo que no es fácilmente atribuible a tránsito o a las otras alternativas van a “todo lo demás”, área enb que hay tres jueces que ven temas de todo tipo, también sin regla alguna, y que pueden verse sobrecargados de material
Se sabe que en los últimos tiempos se han realizado capacitaciones con respecto a la tarea de inspectores de Bromatología y Salud Ambiental, y al labrado de actas de los técnicos de Defensa Civil. A medida que avance el ordenamiento de la repartición, también se espera que se vayan reforzando los controles y se puedan agilizar los procesos de investigación de la novel Fiscalía, que antes recaían solo en el Juzgado.
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