Por Martín Soto
03 Agosto 2023
LA GACETA / FOTO DE ANALÍA JARAMILLO
Que los ánimos están caldeados; que la situación económica de los docentes es crítica; que se deben hacer respetar; y que se deben organizar cuanto antes para sacar el malestar a las calles. Esas fueron las principales consideraciones que retumbaron en la sede de la Agremiación Tucumana de Educadores Provinciales (ATEP), donde el congreso provincial resolvió -de modo contundente- un paro para el viernes 4.
“El congreso decidió llevar adelante una medida de fuerza, sin movilización, y permanecer en estado de alerta para la próxima semana. Si no encontramos respuestas a los planteos salariales se van a tomar medidas”, explicó el secretario general, Hugo Brito.
A la medida de fuerza se plegaron el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) y Unión de Docentes Tucumanos (UDT), que junto a ATEP conforman el Frente Amplio Docente. Reclaman que los incrementos salariales sean al básico y que equiparen la inflación.
La determinación que tomó el órgano que preside Gustavo Orellano fue tajante, como consecuencia de que la Provincia aplazó hasta el lunes a las 9.30 el segundo encuentro por la discusión paritaria, por un viaje del ministro Eduardo Garvich (Economía). “Habernos pasado la fecha es una negativa”; “no podemos estar eternamente esperando que se nos convoque”; y “hay que enseñarle al Gobierno el respeto que debe tener a la docencia”, fueron algunos de las consideraciones que surgieron durante el debate que se extendió por casi tres horas.
Los representantes de las distintas localidades de la provincia afirmaron que es profundo el malestar que existe en la docencia. “Tenemos un huracán de descontento en las escuelas”, graficó el congresal Dante Olmos. Si bien la comisión directiva de ATEP había manifestado la semana pasada la posibilidad de iniciar una medida de fuerza por 48 horas, se explicó que estaban apremiados con los tiempos legales para iniciar la huelga este jueves, por lo que se resolvió comenzar con 24 horas.
Por una cuestión estratégica -según se dijo-, el gremio optó por no movilizar. En líneas generales se coincidió con que se debían organizar bien para salir masivamente a las calles. “La bronca va a movilizar”; “el descontento es general, el Gobierno se nos está riendo en la cara”; y “acá se va a hacer lo que los docentes quieren, no lo que quiera el Gobierno”, fueron otras frases que resonaron en el congreso, que pasó a cuarto intermedio hasta el lunes a las 13.
Algunos congresales que expusieron hasta las lágrimas la difícil realidad que atraviesan. Georgina Galván dijo que muchos colegas venden cosméticos por catálogo y comida para poder paliar la situación. Jéssica Carrizo afirmó que debe “tarjear” la comida en múltiples cuotas y que le genera angustia que se acerque el Día del Niño y no tener un peso. “Esto no da para más”, lanzó.
La ministra de Gobierno y Justicia, Carolina Vargas Aignasse, explicó a LG PLAY que están realizando gestiones y trámites para tener una visión más concreta de la situación financiera de la Provincia y así poder acercar a los gremios una propuesta económica. A su vez, remarcó que siempre se va a priorizar el diálogo al margen de cualquier medida que se tome.
El pasado viernes, los gremios de Apemys y AMET realizaron un paro el pasado viernes.
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