¡Tus deseos son órdenes!
Me gusta mucho aprender de aquéllos que son considerados “maleducados” ya que tienen mucha sabiduría para brindarnos. Un maleducado que me llama mucho la atención es el significativo personaje de Aladino del cuento anónimo “Las mil y una noches”.
Aladino era el indómito hijo de un sastre muy pobre. Con su inconducta motivó a su padre a que lo abandone a su libertinaje. Mientras estaba en sus pillerías, un Derviche se detuvo y le dio dinero haciéndose pasar por su tío. Con engaños lo llevó hasta un lugar muy lejano en donde había un gran agujero que escondía, según el Derviche, un tesoro destinado a Aladino, el que repartirían en partes iguales.
El tesoro era una lámpara de bronce. A su regreso Aladino, desconfió del falso tío y se negó a entregarle la lámpara. Luego de una fuerte discusión, el Derviche lo encerró en el pozo. Aladino en la desesperación frotó sin querer, un anillo que le había dado el extraño y que llevaba en su pulgar. De allí surgió un gigantesco efrit que le dijo: ¡Pídeme lo que quieras…!
Lo mismo ocurrió al regresar a su casa. Su Madre lavando la lámpara, la frotó y salió de allí un efrit que también le dijo: “Soy tu esclavo. Pídeme lo que quieras”
Luego de hacer muchos pedidos a la lámpara, laborales, materiales, de amistad, de familia y de cumplir con muchos sueños, Aladino termina pidiendo y disfrutando del regalo del verdadero Amor. ¡Todos sus deseos eran órdenes!
¿Qué significa la lámpara de Aladino?
Está muy difundida la interpretación de que en realidad la lámpara somos nosotros mismos y el mago o el efrit son nuestros deseos y pensamientos. Luego de “limpiar” nuestro propio ser o sea de atravesar, aceptar y darle verdadero sentido al sufrimiento, al dolor e incluso a la alegría, como Aladino podemos descubrir al “genio” de la lámpara que nos dirá: ¡Todos tus deseos son órdenes!
La clave está entonces en lo que pensamos. ¿Cómo se encuentran tus pensamientos?
Los pensamientos son el origen de la acción y tienen siempre alguna forma de manifestación. Es tu forma de ver las cosas lo que te detiene o te impulsa. Enseñaba Séneca: “No es porque las cosas sean difíciles que no nos atrevamos a hacerlas; es porque no nos atrevemos que las cosas se ven difíciles”
El pensamiento es lo primero que empieza a construir tu realidad. Es el origen de toda abundancia o escasez, fracaso y éxito, ganancia o pérdida, descubrimientos, inventos, logros etc.
El "mago" de la lámpara está esperando que le des órdenes para cumplir tus deseos. Quien tiene pensamientos positivos y optimistas, aún en situaciones muy difíciles, logran pasar sus manos por la lámpara para que el genio salga.
Cuenta la historia que Chesty Puller en la Batalla de Chosin Embalse estaba rodeado por sus enemigos por ambos costados, por delante y por detrás y en ese critico momento dijo a su equipo:
"Hemos estado buscando al enemigo desde hace algún tiempo. Finalmente lo encontramos. Estamos rodeados. Eso simplifica las cosas. Esta vez no tienen escapatoria"
Esta historia demuestra que el conflicto siempre está en el pensamiento.
Tarea para la casa:
Hace un examen de cuáles son los pensamientos que están más frecuentemente rumiando dentro tuyo.
¿Te impulsan? ¿Te entusiasman?
Si no es así tomate un tiempo para lograr detectar esos pensamientos. Con sólo reconocerlos ya los estarás modificando.
Podrás adueñarte de tus deseos y empezar a pedirle al “genio” todo lo que necesites.
¡Tus deseos son órdenes!
¡Hasta la próxima!
