Un hombre entregó su vida para salvar a su esposa al hundirse el crucero

Un hombre entregó su vida para salvar a su esposa al hundirse el crucero

Le dio su chaleco salvavidas. La llamada de despedida de una mujer a su madre.

BUSQUEDA. Buzos buscan a los desaparecidos. REUTERS. BUSQUEDA. Buzos buscan a los desaparecidos. REUTERS.
18 Enero 2012
ROMA, Italia.- La tragedia del crucero "Costa Concordia" provocó distintas reacciones entre los involucrados. Estuvieron los cobardes, como el capitán, que se retiraron pensando más en su vida que en la del resto. Los solidarios, como la madre argentina que logró colocar a sus dos hijas en un bote (una de ellas con discapacidad) y se salvó al saltar y nadar hasta la costa. Los sensibles, como la mujer que habló a su madre para despedirse. Y los héroes, como Francis, un hombre de 71 años que murió para salvar a su mujer.

"Es evidente. Le debo la vida a mi marido", explica Nicole, quien perdió a su marido en el trágico naufragio frente a las costas de Italia. "El me dijo: ?Saltá, saltá?. Y dado que yo no se nadar, me dio su chaleco salvavidas. Dudé para saltar. Entonces se lanzó él primero", relata la mujer francesa de 61 años. "Cuando lo llamé, el me gritó ?No te preocupes, yo me voy a salvar?. Y luego, no lo vi mas", continúa, en diálogo con el diario francés Le Figaro.

"Cuando estaba en el agua, sola, a la deriva, pensé en mis hijos y mis nietos. Para tratar de mantenerme. Para tratar de vivir", recuerda. "No sé cómo llegué hasta la orilla. Nadé durante varios minutos, no puedo decir exactamente cuánto tiempo, hasta que me encontré en una roca", cuenta. De ahí, fue rescatada por los pobladores. "Vinieron a recogernos y nos llevaron a una iglesia. Yo estaba congelada", dice. "Estoy enojada porque no había barco para nosotros y no había nadie para salvar a mi marido", concluye su historia una de las personas que más padeció la pérdida de sus seres queridos.

Corta Despedida
"¿Mamá? Soy yo. Es terrible. No sé si nos veremos más. El crucero se está hundiendo y todavía no hemos podido ponernos a salvo. No, no, no llores. Rezamos mamá, rezamos juntas también por las personas que conmigo están a punto de morir”, le dijo a su madre Angela Castellani, una música de  35 años, que viajaba junto a su marido, Diego Schiavo. Después de una conversación que duró unos 30 minutos, la mujer logró subirse a un bote salvavidas junto a su marido y salvarse de la tragedia. Una vez a salvo, volvió a llamar a su mamá, ahora con una muy buena noticia. (La Nación ? Abc.es).

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