08 Agosto 2011
LLUVIOSO AMANECER. Los bomberos trabajaron toda la noche en Tottenham REUTERS
LONDRES.- Londres intentaba reponerse ayer de los peores actos de violencia vistos en la capital británica en años, que fueron atribuidos a delincuentes, aunque residentes culparon por los desmanes al enojo por las dificultades financieras. Alborotadores con bombas incendiarias asolaron Tottenham, una zona de escasos recursos, y enfrentaron a la policía durante la madrugada de ayer, incendiando vehículos policiales, edificios y un ómnibus de dos pisos.
La policía informó que 26 efectivos fueron heridos cuando los manifestantes les lanzaron botellas y piedras, y atacaron edificios -incluyendo bancos, tiendas y un supermercado- e incendiaron tres vehículos policiales. Residentes apuntaron que se vieron forzados a huir de sus casas para escapar del enfrentamiento, mientras la policía en caballos y funcionarios anti-disturbios a pie cargaron contra la multitud para hacerla retroceder.
Los tumultos sólo lograron ser controlados después de horas de esporádicos enfrentamientos. Ayer, los edificios aún estaban humeantes, las piedras obstruían las calles y las alarmas contra ladrones seguían sonando. Con la calma llegó la evaluación: casi 50 detenidos, edificios incendiados y saqueos en una casa de venta de electrodomésticos y en otra de celulares.
Los problemas comenzaron la noche del sábado tras una protesta pacífica por la muerte de Mark Duggan, de 29 años, en un intercambio de disparos con la policía que es investigado, ya que, dicen, lo habrían ejecutado. (Reuters)
La policía informó que 26 efectivos fueron heridos cuando los manifestantes les lanzaron botellas y piedras, y atacaron edificios -incluyendo bancos, tiendas y un supermercado- e incendiaron tres vehículos policiales. Residentes apuntaron que se vieron forzados a huir de sus casas para escapar del enfrentamiento, mientras la policía en caballos y funcionarios anti-disturbios a pie cargaron contra la multitud para hacerla retroceder.
Los tumultos sólo lograron ser controlados después de horas de esporádicos enfrentamientos. Ayer, los edificios aún estaban humeantes, las piedras obstruían las calles y las alarmas contra ladrones seguían sonando. Con la calma llegó la evaluación: casi 50 detenidos, edificios incendiados y saqueos en una casa de venta de electrodomésticos y en otra de celulares.
Los problemas comenzaron la noche del sábado tras una protesta pacífica por la muerte de Mark Duggan, de 29 años, en un intercambio de disparos con la policía que es investigado, ya que, dicen, lo habrían ejecutado. (Reuters)
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