La Corte Suprema de Estados Unidos revocó la protección constitucional al derecho al aborto

La Corte Suprema de Estados Unidos revocó la protección constitucional al derecho al aborto

La anulación del fallo Roe vs Wade elimina una garantía que se mantuvo por 50 años. Veintiséis estados se alistan para prohibirla

SIN RESIGNACIÓN. Aunque ya se conocía la decisión del tribunal superior, la confirmación fue recibida con enojo, banderas al revés en señal de descontento y carteles que dicen que los jueces tienen “sangre en sus manos”. SIN RESIGNACIÓN. Aunque ya se conocía la decisión del tribunal superior, la confirmación fue recibida con enojo, banderas al revés en señal de descontento y carteles que dicen que los jueces tienen “sangre en sus manos”.

La Corte Suprema de Estados Unidos anuló un fallo histórico sobre el acceso al aborto como un derecho constitucional, con lo que deja desprotegidas a millones de mujeres, en todo el país.

La sentencia habilita a los estados la posibilidad de prohibirlo, lo que deja a Estados Unidos con grandes desigualdades internas y lo pone por detrás de otras naciones desarrolladas en materia de derechos reproductivos. Veintiséis estados se preparan para perseguir el aborto en parte o totalmente. En algunos de los más conservadores, como Texas y Missouri, ya se implementa una prohibición casi completa (incluso en caso de violación o incesto).

La sentencia del caso Roe, en 1973, reconoció el derecho a la intimidad personal, en virtud de la Constitución estadounidense, y protegió la decisión de una mujer de interrumpir su embarazo.

La decisión, además, otorga una “hoja de ruta” para acabar con otras libertades, dijeron los magistrados que votaron en contra de anular el derecho constitucional garantizado por el fallo Roe vs. Wade, que hace 50 años legalizó el aborto en todo el país.

La Corte Suprema de Estados Unidos revocó la protección constitucional al derecho al aborto

Se pone en riesgo, dijeron, derechos reconocidos a lo largo de décadas, que resguardaron libertades personales como la anticoncepción, en una decisión de 1965; el matrimonio interracial, en 1967; la intimidad entre personas del mismo sexo, en 2003 y (en 2015) la posibilidad de que se puedan casar gays y lesbianas.

El peligro de convertir en realidad la distopía imaginada por Margaret Atwood en “El Cuento de la Criada”, en la cual las mujeres y las disidencias van perdiendo sus derechos civiles nunca estuvo más cerca.

“Un día triste”, lo llamó el presidente Joe Biden que, a pesar de que es católico, considera que las creencias individuales no pueden reglar la vida colectiva. El mandatario opinó que el fallo pone en riesgo derechos establecidos, y llamó a estar preparados para “nuevas amenazas” de parte de los conservadores del tribunal.

El acceso a la salud reproductiva dependerá del lugar de residencia / Infografía de www.larepublica.co El acceso a la salud reproductiva dependerá del lugar de residencia / Infografía de www.larepublica.co

El fallo, redactado por el juez conservador Samuel Alito, forma parte de la agenda impulsada por las iglesias evangélicas fundamentalistas, que lograron gran influencia a través de políticos como Mike Pence, vicepresidente de Donald Trump. El ex mandatario, investigado por intento de golpe de Estado en 2021, fue quien aprobó el ingreso de la última integrante de la Corte, la conservadora Amy Coney Barrett. Pence y Trump festejaron la decisión del tribunal.

Otras voces, como la de la Organización de Naciones Unidas (ONU), a través de su secretario General, Antonio Guterres y la jefa de la oficina para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, mostraron horror ante la decisión que afectará la vida y la salud de millones de personas en el país norteamericano. “Restringir el acceso al aborto no impide que la gente busque abortar, sólo lo hace más mortal”, dijo Stéphane Dujarric, portavoz de Guterres. “La salud y los derechos sexuales y reproductivos son la base de una vida de elección e igualdad para mujeres y niñas”, señaló.

Casi la mitad de los embarazos en el mundo no son deseados y más del 60% pueden acabar en aborto, sea legal o no en el país de residencia, según la agencia de salud sexual y reproductiva de la ONU. La diferencia, señala el organismo, es que un aborto clandestino es inseguro, y puede tener graves consecuencias.

Apostillas

Caso Dobbs.- El fallo de la Corte Suprema se produjo en torno a un caso relacionado con una ley de Mississippi, que prohíbe los abortos después de las 15 semanas de embarazo. Mississippi se encuentra entre los 13 estados que tienen “leyes de activación”, listas para prohibir el aborto con la anulación de Roe.

La Corte Suprema de Estados Unidos revocó la protección constitucional al derecho al aborto

Protección.- Joe Biden dijo que su gobierno protegerá el acceso de las mujeres a los medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, incluidas las pastillas para la anticoncepción y el aborto con medicamentos, y que combatirá los esfuerzos para impedir que las mujeres viajen a otros estados para abortar.

Intento anterior.- La Corte Suprema, en una sentencia de 1992, reafirmó el derecho al aborto y prohibió las leyes que imponen una “carga indebida” al acceso al aborto.

Filtración.- En mayo se filtró un borrador de la sentencia conocida el viernes en el que se indicaba que el tribunal probablemente anularía Roe contra Wade, lo que provocó una tormenta política y una denuncia de los magistrados por la ruptura del secreto.

Inseguros.- El Fondo de Población de la ONU, la agencia de salud sexual y reproductiva de la organización, dijo que “un 45% de los abortos en el mundo son inseguros, lo que hace que esta sea una de las principales causas de muerte materna”.

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