Suelo: cuidarlo hoy para alimentarse en el futuro

Suelo: cuidarlo hoy para alimentarse en el futuro

Para cualquier hombre de campo el suelo es un recurso indispensable para los actuales sistemas tradicionales de producción. Debido a ello, su cuidado resulta fundamental, pensando en el futuro. Y a partir de allí, los sistemas de producción sustentables y amigables con el ambiente resultan clave para mantener los suelos a lo largo del tiempo.

Los países con escaso suelo utilizan soportes inertes. Y el hombre hecha mano a toda la tecnología disponible para dar a la planta aquello que necesita para crecer y desarrollarse. Por ejemplo, mediante un sistema como la hidroponía.

En este caso, países muy desarrollados y con un recurso suelo escaso avanzaron muchísimo en esta tecnología, y producen una infinidad de cultivos y vegetales que día a día son más solicitados por los consumidores.

En general muy poco se produce en el mundo como para pensar en que algún día se puedan llegar a satisfacer las necesidades alimentarias globales. Sin duda se trata de una tendencia que avanza, y que seguramente seguirá creciendo, dependiendo de la demanda de estos productos. Pero por el momento, el suelo agrícola sigue siendo el caballito de batalla a la hora de producir alimentos.

Soporte de toda vida

Esto explica que el suelo sea el soporte de toda vida -animal y vegetal- que se da en la Tierra, y debe ser cuidado para que las generaciones venideras puedan producir su alimento. En definitiva, el suelo permite la vida en todo el sentido de la palabra, ya que casi todo lo que se produce de alimentos en el mundo se hace sobre este importante recurso y por ello es necesario cuidarlo.

Los graves problemas climáticos que se vienen dando originados por el calentamiento global no solo perjudican al hombre, que sufre las consecuencias que muchas veces él mismo provoca; también el suelo y la naturaleza toda.

Tener presente la importancia de cuidar al recurso suelo es fundamental, ya que el futuro de la alimentación pasa por este concepto y los productores en general deben seguir el camino de conservarlo.

Debido a ello debemos tener siempre en cuenta que mientras no hagamos nada para evitar más desequilibrios en el ambiente y en los suelos, los efectos negativos seguirán dándose año tras año.

Desafíos

Resulta importante afirmar que el sector agropecuario regional y nacional tiene desafíos diversos y numerosos para seguir mejorando la forma de producir. Los aportes de hace tiempo -la siembra directa, menor uso de agroquímicos y mejores productos, menor uso de agua y la utilización de mejores semillas genéticamente modificadas para su mejor adaptación en cada región- no son suficientes. Y muchas veces, un inadecuado manejo de estas herramientas termina siendo muy perjudicial.

Rotaciones

Hay que resaltar que en el NOA se sostengan las rotaciones con el cultivo de maíz y sorgo y se impulse a un mayor uso, para mejorar el sistema productivo. Pero deben generarse de manera permanente diversos incentivos para que el productor siembre cultivos que sirvan para conservar el suelo y, a la vez, aplique metodologías de trabajo que afiancen ese proceso.

Cabe comentar que desde hace mucho tiempo el sector agropecuario regional y nacional tiene desafíos diversos y numerosos relacionados a producir conservando el ambiente. Estos deben ser profundizados para que mejoren la forma de producir y a la vez, aporten más a la conservación del ambiente.

Para este objetivo, el sector requiere de herramientas biotecnológicas y de manejo de manera permanente, que se van perfeccionando a medida de que avanzan diversas investigaciones al respecto.

Pero estas que deben ir acompañadas por la toma de decisiones de políticas agropecuarias que permitan su implementación y, por sobre todo, que den previsibilidad en el tiempo para que el productor siga trabajando su suelo como corresponde.

Todo esto permitirá que el hombre de campo produzca los alimentos que nuestro país requiere y que el mundo demanda. Sobre todo en las actuales circunstancias, en la que estamos viviendo conflictos bélicos y crisis económicas.

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