14 Junio 2022
REUNIÓN EN LA ROSADA. El Presidente y el ministro de Economía evaluaron las cifras de la coyuntura.
La semana se presenta un tanto complicada en lo económico para el Gobierno. Por eso, el ministro de Economía, Martín Guzmán, arrancó ayer con una reunión con el presidente, Alberto Fernández, donde evaluaron las situaciones y acciones del Gobierno sobre los acontecimientos inmediatos. Entre ellos, la cifra oficial de la inflación de mayo que dará a conocer hoy el Indec.
El ministro aclaró ayer que no viajó a Canadá para acompañar a seis gobernadores que buscan atraer inversores para distintas explotaciones mineras, porque el vuelo se canceló. “Yo no suspendí el viaje. La empresa canceló el vuelo y no llegaba al Foro de Minería. Asistiré de forma virtual”, dijo a través de Twitter.
A continuación, negó la posibilidad de un default de la deuda en pesos. Al salir al cruce de una nota del diario Clarín, el titular del Palacio de Hacienda advirtió: “en cuanto a la barbaridad de defaultear deuda en pesos, nuestro Gobierno jamás haría eso”.
Otra señal de la turbulencia financiera local e internacional, fue la reunión en la Casa Rosada con el presidente del Banco Central, Miguel Pesce.“Por temas previstos anteriormente”, fue la escuálida justificación oficial.
El mercado arrancó la semana con una fuerte tensión, en línea con la volatilidad por la situación de la deuda en pesos, la caída de los bonos, la fuerte suba de los dólares, y la pronunciada baja de las acciones en la bolsa porteña y los papeles que cotizan en Wall Street.
Según los economistas, la caída de los bonos CER de la semana pasada despertó a más de un gigante. Analistas financieros evaluaron por la fuerte caída de los bonos que ajustan por CER, la disparada del riesgo país y de los dólares financieros, las posibilidades de un default en pesos y las presiones que esta situación lleva sobre las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional. Una sola acción que despertó a varios gigantes dormidos al mismo tiempo.
En tanto, en el inicio de la semana los títulos públicos en dólares perdieron 2% y volvieron a marcar sus precios más bajos desde la reestructuración de la deuda. Las acciones argentinas en Wall Street cayeron hasta 12%.
La plaza accionaria argentina inició la semana en rojo, en medio de un panorama global adverso, ante los temores de una mayor inflación mundial que obligaría a los bancos centrales a subir sus tasas de interés afectando el crecimiento económico.
En este escenario, el riesgo país del JP Morgan creció 70 unidades para la Argentina, a 2.113 puntos básicos después de tocar los 2.124 enteros al mediodía, un máximo desde el 10 de septiembre de 2020.
En este marco, el Ministerio de Economía enfrentará una nueva licitación de bonos del Tesoro nacional en un contexto de desconfianza. A esto se le suman los datos de la inflación que darán una suerte de respiro tras el pico de marzo pero aún en niveles elevados y preocupantes. El jueves, la suba de tasas parece ser un hecho, y afirman los analistas que no se descartan más durante el año. La suba respondería no sólo a las perspectivas de inflación sino de una necesidad de volverlas positivas. Por eso, el dato de la inflación de mayo será clave para la toma de decisiones del equipo económico.
Ayer, el Banco Central sumó unos U$S 25 millones a las reservas, la mayor compra de divisas en lo que va del mes; mientras el dólar financiero y el “blue” operan con fuertes alzas. La autoridad monetaria viene de comprar sólo U$S 40 millones durante la semana pasada, luego de que se realizaran pagos de energía por U$S 500 millones.
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