Atlético: mantiene y da confianza

Las transiciones en un trabajo (cualquiera sea el caso) son difíciles. El cambio del entrenador de un equipo suele ser un ejemplo y tiene su grado de complicación. No sólo por la logística y el adaptarse a cosas nuevas, sino también a nivel personal. ¿Qué tenía aquel que no tiene este o viceversa? Hasta ahora, Pablo Guiñazú alcanzó límites altos de respeto para con su antecesor, Omar De Felippe. Jamás tiró una indirecta ni siquiera un tiro por elevación, mucho menos una crítica directa hacia su trabajo. Aún así, el nuevo entrenador obviamente dejó en claro que su gestión será diferente: “vamos a a exigirles (a los jugadores) lo que nosotros pretendamos”, anunció en estos días, como marcando un límite entre una y otra persona. Pero aún en el mantenimiento de varios de los nombres que venía utilizando “ODF” antes de su renuncia, aparecen las diferencias. Es que mañana ante Platense, el “Cholo” pondría el mismo equipo titular en la cancha por tercer partido consecutivo, una “marca” que jamás llegó a alcanzar De Felippe en su estadía en Atlético.

“No nos podemos bañar dos veces en el mismo río, porque ni el hombre ni el río serán los mismos”, dijo Heráclito de Efeso, el filósofo griego. La paradoja apunta a una teoría de cambio constante a la que De Felippe se hubiera adherido inmediatamente.

Apenas si el ex técnico de Atlético llegó a repetir una sola vez el equipo titular. Sin hacer exactamente un juicio de valor, los cambios obedecieron a decisiones tácticas, lesiones y suspensiones. Aún así, recibió la crítica de sus dirigidos. “Creo que falta afianzarnos en todos los aspectos, falta la confianza que te da el técnico de no estar haciendo cambios todos los partidos”, aseguró Oscar “Junior” Benítez tras la derrota ante Boca en septiembre.

El mensaje que significaron esas palabras fue claro para el entrenador en ese momento y parece haberlo sido también para Guiñazú a su llegada a Tucumán, tal vez de manera retroactiva. Si hay algo que quiere darle a sus dirigidos el actual técnico de Atlético es mucha confianza. Quizás por eso este fin de semana, el DT volvería a poner a los 11 que jugaron ante Patronato, aunque no hayan podido ganarle: Cristian Lucchetti; Felipe Campos, Marcelo Ortiz, Jonathan Cabral y Gabriel Risso Patrón; Ramiro Carrera, Guillermo Acosta, Cristian Erbes y Leonardo Heredia; Augusto Lotti y Ramiro Ruiz Rodríguez. Exactamente los mismos que empataron ante Estudiantes y ante el “Patrón” el lunes pasado. El “Cholo” desafía a Heráclito: si para este el río y el hombre no se repiten, el hombre y el equipo “decano” pueden ser los mismos por varias veces.

No es raro entonces que mañana en la cancha de Platense, Atlético ponga el mismo equipo titular en realidad por cuarta vez consecutiva. Claro, se trata del mismo equipo el que le ganó a Argentinos 4 a 3, pero con la dirección técnica de Martín Anastacio. Sin embargo, entre el técnico de la Reserva y Guiñazú recibieron el mismo mensaje de Benítez y sus jugadores y puede que sea todo parte del mismo plan de inyección de confianza tras tantas modificaciones.

Otro síntoma de ello fueron las públicas declaraciones del nuevo entrenador. En las dos conferencias de prensa pos partido, el cordobés exageradamente se despachó en elogios y en recalcar virtudes a sus dirigidos. “Piropos” que luego respalda en la cancha volviéndolos a poner.

Incluso hasta en la rotación parece decidido a darle la oportunidad a los que vienen jugando y no “cambiar” los cambios o al menos la dinámica de los reemplazos. Los ingresos desde el banco de Ciro Rius y Cristian Menéndez son una fija en todos los últimos partidos que se jugaron, aunque aporten -al menos hasta ahora- poco y nada al equipo. La confianza hasta que lo logren sigue estando de parte del cuerpo técnico.

“Yo soy muy positivo, pero también el primero en hacer autocrítica. Jugando así los resultados van a venir pronto”, asegura el “Cholo”, que sigue confiando en sus jugadores y que, por ahora, no piensa cambiar casi nada de su equipo.

Ensayo y a volar

El plantel se entrenará por la mañana muy temprano y en el estadio, inmediatamente partirá al aeropuerto ya que a las 11.30 sale el vuelo que llevará a la delegación a Buenos Aires. El regreso está pautado para el domingo, desde las 18.30.