02 Septiembre 2021
Debate Mendoza-Gutiérrez: primó el respeto entre las precandidatas
A lo largo de su participación, tanto Mendoza como Gutiérrez eludieron cualquier confrontación verbal directa entre ellas, se mantuvieron fieles a sus líneas discursivas y moderadas; sólo la legisladora de Alderetes fue un poco más incisiva.
LA GACETA / FOTOS DE JUAN PABLO SÁNCHEZ NOLI
SANDRA MENDOZA: "MANZUR NO MODIFICARÁ LA CONSTITUCIÓN"
Nahuel Toledo
LA GACETA
Con una impronta moderada y sin ánimos de confrontar con su rival, Sandra Mendoza aseguró que quiere representar a la provincia de Tucumán en el Senado de la Nación para impulsar que cada vez sean menos los trabajadores y jubilados que paguen Ganancias, promover la creación de Defensorías de Niños y acompañar, con políticas concretas, a las mujeres que sufren violencia de género.
En relación a su visión sobre el Impuesto a las Ganancias, Mendoza mostró una noticia de años atrás para recordar que el ex presidente Mauricio Macri se había comprometido a erradicar ese tributo, sin embargo “más trabajadores y jubilados terminaron pagándolo”. “Con el gobierno de Alberto Fernández hubo una transformación porque modificó la ley y de más de dos millones de jubilados que pagaban ganancias bajaron a cerca de 700.000”, detalló la legisladora provincial. Y enfatizó: “No me comprometo a eliminar este impuesto, pero sí a trabajar por todos los argentinos y para que cada vez sean menos quienes lo paguen”.
SIN LEY, DISCUSIÓN TERMINADA. Mendoza se manifestó en contra de un posible retorno del Servicio Militar. “No estoy a favor. Además, esa ley ya se derogó”, afirmó.
La precandidata a senadora en segundo término de la lista Lealtad Peronista (Frente de Todos) se mostró dubitativa durante algunos segmentos del debate, pero fue enfática al afirmar que de ninguna manera el gobernador Juan Manzur impulsará la reforma de la Constitución de la Provincia ni buscará una nueva reelección en el cargo.
Sobre sus propuestas para lograr disminuir los índices de pobreza en la provincia, la dirigente manzurista hizo hincapié en la necesidad crear condiciones económicas y jurídicas para que nuevas industrias se radiquen. “Es prioritario generar fuentes de trabajo genuinas e instalar escuelas de oficio para que también los jóvenes obtengan conocimientos con salida laboral”, sostuvo. Mendoza también aprovechó el último segmento de debate libre para profundizar esta idea. “Con las vacunas estamos vislumbrando una salida a la pandemia y ahí debemos trabajar juntos, traer inversiones. En la provincia hay un trabajo fuerte en este sentido y necesitamos trabajar para bajar la presión fiscal y permitir que más empresas se instalen y generen empleo”, puntualizó.
La legisladora no dejó pasar por alto los casos de violencia que viven muchas mujeres en la provincia y además de destacar que esos índices incrementaron el año pasado a raíz de la pandemia, prometió que en el Senado de la Nación trabajará para “terminar con este flagelo”. “Desde Nación acompañamos a las mujeres que sufren violencia de género, pero nosotros también tenemos que trabajar para que planes del Estado se conviertan en fuentes de trabajo que le brinden independencia economía a la mujer”.
Finalmente, cuando le tocó exponer su postura sobre el sistema electoral, Mendoza defendió la tradicional boleta de papel que se implementará en los próximos comicios. “Confío en el sistema porque garantiza la transparencia, la voluntad popular y la democracia”, dijo.
GRACIELA GUTIÉRREZ: INSEGURIDAD Y REFORMA, TEMAS QUE PREOCUPAN
Homero Terán Nougués
LA GACETA
Graciela Gutiérrez desarrolló sus ideas en el debate de forma tranquila, apacible, a tal punto que por momentos llegó a sonar como un discurso apático. En este sentido, la precandidata a senadora en segundo término por la lista Todos por Tucumán (espacio que lidera el vicegobernador Osvaldo Jaldo) casi no cruzó palabras con su rival y el debate se desarrolló con una cordialidad fría, con amabilidad distante.
Durante su discurso, y en especial en los minutos libres, la precandidata hizo referencia a dos temas que suelen destacar los jaldistas: la inseguridad y el “no” a la reforma de la Constitución Provincial.
“Debemos trabajar para darles a las fuerzas (de seguridad) que se encuentran en Tucumán las herramientas que necesitan. El delito evolucionó y el narcotráfico avanzó de manera preocupante. En Tucumán los índices de inseguridad siguen avanzando y hay que tomar políticas firmes”, afirmó Gutiérrez cuando se le consultó sobre el rol de las fuerzas federales de seguridad en las provincias.
BUEN FINAL. La precandidata a senadora se puso un saco blanco para el debate y siguió la costumbre de la mayoría de las mujeres que participaron en Tucumán Debate.
Más tarde, durante uno de los debates libres, agregó: “el Estado debe estar presente para darle seguridad a la sociedad. Al verse superados, los municipios decidieron tomar cartas en el asunto”.
En cuanto a la consulta acerca de si considera necesario modificar la Constitución Provincial, la precandidata fue clara al dar su punto de vista: “no es el momento, esta es una discusión de un sector reducido de la política que busca más el bien personal que el bien común. Necesitamos centrar la atención en seguridad, educación, generación de empleo, salud y no en atender intereses de un sector reducido de la política”.
Con esas declaraciones, Gutiérrez trató de remarcar su posición como miembro del espacio que comanda el vicegobernador. Más allá de esas ideas -que, en realidad, no se diferenciaron tanto de las que expresó su rival- el resto de las propuesta siguió una línea discursiva muy similar a la de Sandra Mendoza, precandidata a senadora en segundo término por Lealtad Peronista.
Para hablar de cómo bajar la pobreza, Gutiérrez sostuvo que se debe combatir con empleo genuino y educación; con políticas a mediano y largo plazo. Expresó ideas referidas al “empleo genuino”, “oportunidades a los jóvenes” y “educación de calidad”), y deslizó que algunos proyectos que atienden estas necesidades se desarrollan en Alderetes, el municipio de Aldo Salomón.
Durante los espacios de debate libre, mientras, las dos precandidatas se dividieron el tiempo casi en porciones iguales. De esta forma, Gutiérrez tomó la iniciativa en los debates libres del primer y tercer bloque, mientras esperó su turno durante el segundo bloque.
Por momentos, el discurso fue pausado, lento, y con mucha lectura de los “apuntes” que llevó al atril. Dio la sensación que su asesor trabajó mucho en ella para lograr un comportamiento tan correcto que nunca salió a confrontar ideas.
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