Los enredos de Nación con la vacuna anti covid

Los enredos de Nación con la vacuna anti covid

Los dichos del presidente ruso provocaron un fuerte impacto en Argentina, que tuvo varios idas y vuelta en torno al fármaco.

“NO ME LA PUSE”. Bastó que Putin dijera que no se vacunó para que se produjera una hecatombe sanitaria y se desatara una crisis política. “NO ME LA PUSE”. Bastó que Putin dijera que no se vacunó para que se produjera una hecatombe sanitaria y se desatara una crisis política.
18 Diciembre 2020

Una declaración en Rusia que generó un sismo político y social en la Argentina

Mientras la Casa Rosada ultimaba en Moscú el arribo al país de la vacuna Sputnik V, el presidente Alberto Fernández (Frente de Todos) y su equipo han sido duramente cuestionados por parte de la sociedad y de la oposición. El sismo que sacudió al Gobierno se originó en Rusia, donde el mandatario Vladimir Putin (68 años) informó que todavía no se inoculó con la vacuna porque aún no se probó para los mayores de 60 años. “Los expertos nos dicen que las vacunas que entran en la circulación civil se indiquen a ciudadanos de una determinada edad; aún no han llegado a gente como yo. Soy una persona respetuosa de la ley, escucho las recomendaciones de los especialistas y por eso aún no me he vacunado, pero lo haré tan pronto sea posible”, dijo en rueda de prensa.

Del anuncio de una vacunación inminente, a la incertidumbre ante la falta de resultados

Las palabras del líder ruso dejaron en “off side” al equipo sanitario de Fernández, que viajó a Moscú para traer las primeras 600.000 dosis para inocular a 300.000 personas antes de fin de año. Desde un primero momento Fernández remarcó que las vacunas se aplicarán a los adultos mayores y al personal esencial. Ayer, sin embargo, la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, reconoció que los análisis clínicos se dan por grupos y que por ahora se recomienda su aplicación en menores de 60 años. De todos modos, dijo: “están terminando los últimos pasos para poder aprobar el uso de esta vacuna en mayores de 60 años. Es fundamental para el mundo y para nuestro país”, expresó a C5N. Se estima que esta etapa finalizará en siete o diez días.

Reproches por la falta de información hasta amenaza de juicio político

Mientras en las redes sociales brotaron todo tipo de mensajes negativos contra la gestión nacional, el arco político opositor se despachó contra las autoridades tras las expresiones de Putin. El jefe del bloque de Juntos por el Cambio en Diputados, Mario Negri, manifestó su sorpresa y enojo ante las declaraciones. “La viceministra ha viajado a Rusia y jamás comunicó esto. Es una vergüenza que no se le explique al Congreso cuál es el estado de situación y mantengan todo con secretismos. Exigimos que las máximas autoridades de Salud asistan a la Cámara de Diputados”, dijo. En la misma sintonía se expresó el tucumano José, Cano. “Acá el Gobierno confirma que sí se aplicará a mayores. Una vergüenza. Ginés González García debería renuncia. Se compraron millones de dosis que en Rusia no se aplican a la población de riesgo. Desde el bloque vamos a pedir juicio político para González García. Tiene que dar una explicación a todo el país de por qué se está jugando con la salud de los argentinos”, bramó en las redes sociales.

El anuncio de la firma del convenio y la confianza para la Sputnik V

La semana pasada la Casa Rosada informó la firma del contrato para la adquisición de la vacuna Sputnik V desarrollada por el Centro Nacional Gamaleya de Epidemiología y Microbiología ruso. “El contrato dice que vamos a poder contar con las dosis suficientes para vacunar entre enero y febrero a 10 millones de argentinos”, detalló el Presidente. Agregó que se vacunarían a 300.000 personas antes de fin de año, 5 millones en enero y el resto en febrero. Fernández, de 61 años, había dicho que confiaba en la efectividad de la vacuna por lo que sería el primero en aplicársela. La vacuna, con una efectividad superior al 90%, debe ser aprobada por Anmat.

Negociaciones con Pfizer que no se concretaron pero tampoco se descartan

Otro de los eventos que generó cuestionamientos hacia la Casa Rosada días atrás fue la negociación con Pfizer. La firma norteamericana fue la primera con la que el Gobierno entabló conversaciones y se había estimado que las dosis llegarían al país este mes, pero González García explicó que no llegaron a un acuerdo, pero tampoco lo dio por cerrado. “En la negociación se nos pidió una ley que les diera inmunidad, y salió. Después decían que esa ley no era suficiente, que había que hacer una nueva, además que el contrato lo debía firmar el Presidente. Son condiciones un poco inaceptables; ellos cambiaron las condiciones”, dijo. Estas vacunas deben ser conservadas a menos de 80 grados.

Tres convenios para tratar de combatir al virus, que ya dejó más de 40.000 muertos

Mientras las autoridades se mantienen atentas a lo que informe Rusia con la Sputnik V, cabe destacar que la Argentina firmó otros dos convenios para adquirir vacunas contra la covid-19: el primero fue con Oxford/AstraZeneca, por 22 millones de dosis, el segundo con COVAX, que es una organización creada por la Organización de las Naciones Unidas, por 9 millones. En agosto, Fernández y González García anunciaron que Argentina y México producirán la vacuna de Oxford/AstraZeneca que se distribuirá en América Latina. “Es un proyecto sin fines de lucro que nos ha permitido acceder a una a una vacuna a un precio razonable de tres o cuatro dólares por dosis. Es un alivio para el futuro, pero no es una solución para el presente”, dijo Fernández. Las entregas comenzarían en el primer trimestre de 2021. Las vacunas a través de COVAX llegarían a finales de febrero.

Argentina ocupa el puesto 14 de 40 países que ya encargaron dosis contra la covid-19

Con 47 millones de dosis encargadas, la Argentina ocupa el puesto 14 de 40 países que ya reservaron sus vacunas, según un análisis del Centro de Innovación de Salud Global de la Universidad Duke de EEUU. El trabajo muestra que el acceso al fármaco es muy desigual, algo que preocupa a la Organización Mundial de la Salud (OMS). Los países más ricos concentran más de la mitad de las dosis compradas a nivel mundial. EEUU, que tiene 328 millones de habitantes, encabeza la nómina con 2.610 millones de dosis. Detrás, la Unión Europea con 1.965 millones.

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