Plan nacional made in Mempo

Sorprendió a todos. Vuelve el Plan Nacional de Lecturas, pero esta vez con una “s” al final. Ya no es el Plan Nacional de Lectura, sino de Lecturas, como dando a entender que no se trata del simple hecho de promover un hábito, sino más bien de fomentar la crítica y las posibles miradas sobre un mismo tema.

El nuevo plan sorprendió a todos y casi hasta a la misma coordinadora. Según el periodista Luciano Sáliche, de Infobae, “Natalia Porta López fue la última en enterarse”. Revela que antes de proponerle a ella el cargo que anunció con bombos y platillos el propio presidente de la Nación, Alberto Fernández, Adriana Puigróss, secretaria de Educación, y Nicolás Trotta, ministro de Educación, habían hablado con su pareja, el escritor Mempo Giardinelli.

¿Quien es Giardinelli? Una primera respuesta podría ser es un escritor chaqueño, muy reconocido, periodista y uno de los “intelectuales K” que abonan el colchón ideológico del Modelo. La segunda, es presidente de la Fundación Mempo Giardinelli, organización dedicada al fomento de la lectura. Fue también el que planteó la eliminación del Poder Judicial y propuso crear una nueva instancia “de origen popular que surja de un referéndum donde el pueblo argentino se manifieste, se constituya en poder constituyente y elabore un nuevo pacto social”.

Ahora volvemos a Natalia. Ella ya es conocida por su trabajo en el tema de lectura. Concretamente trabajó en el Foro Internacional por el Fomento del Libro y la Lectura que se organiza la fundación Mempo todos los años en Resistencia, Chaco. Además ya estaba en el equipo técnico nacional del Plan de Lectura del Ministerio de Educación de la Nación entre los años 2008 y 2016, hasta que cayó en la gestión Macri. Ella tuvo la representación de las provincias del NEA y Santa Fe.

Toda esta explicación sirve, quizás, para entender la razón por la que no se han buscado muchos candidatos para la coordinación. Tal vez porque ella ya conoce el tema y pertenece a una estructura que viene funcionando.

De lo que se sabe es que el nuevo Plan Nacional de Lecturas tendrá una mesa chica que tomará las decisiones sobre los contenidos, y que trabajará codo a codo con determinado grupo de escritores y de editores. Se estima que tendrá un presupuesto inicial de 400 millones de pesos, que estará destinado a la impresión de libros para el primer semestre de este año. El propio ministro dijo que se volverán a mandar publicaciones a las escuelas, como ocurría en la época kirchnista. Esto, sin duda, produce una fuerte puja entre los que entran y los que no en el negocio editorial.

Un punto “taquillero” del plan, que seguramente aplaudirán de lleno padres y docentes, es hacer que los chicos tengan a disposición en su escuela “180 lecturas posibles para 180 días de clase”. Para ello llegarán textos clásicos y contemporáneos a las escuelas elegidos por un consejo asesor del que forma parte el ministro de Educación de Tucumán, Juan Pablo Lichtmajer. Además se reeditará la colección “Leer por leer” cuya primera edición era de 2007, cuando el Plan Nacional de Lectura era coordinado por Gustavo Bombini. La Fundación Mempo Giardinelli era también la responsable de seleccionar los textos para ese primer volumen, que llevaba un prólogo del escritor. La selección todavía está colgada en la web y se la puede consultar en bnm.me.gov.ar.

Ahora todo esto se apoyará con una campaña publicitaria titulada “Una que leamos todos”. ¿Recuerda que en la Asamblea Legislativa el Presidente habló de una “reformulación” del manejo de la pauta publicitaria oficial y dijo que los contenidos que se difundirán tendrán a partir de ahora un contenido pedagógico? Este sería un ejemplo: proponer algunos textos para leer en familia, en espacios que el Estado destinaba a la política.

¿Cómo se desarrollará este plan? ¿Cómo se articulará el viejo hábito de leer libros con la nueva forma de consumir contenidos a través de medios digitales? ¿Cómo será la capacitación de los docentes, que ya anunció Lichtmajer que se dará en Tucumán? La única forma de saberlo es una familia atenta a los textos que leen sus hijos, alerta para apoyar la lectura y descifrar las lecturas con “s”.