Quieren conocer la historia de Tucumán con sus diferentes miradas y sin imposiciones

Quieren conocer la historia de Tucumán con sus diferentes miradas y sin imposiciones

Tres alumnos ganadores en la Olimpíada Nacional de Historia opinan sobre cómo despertar el interés en los alumnos por esta disciplina.

LA TECNOLOGÍA LOS LLEVÓ A ENAMORARSE DE LA HISTORIA. Santiago Viaña (colegio Pucará) y Romina Tejerina (colegio Carlos Pellegrini). la gaceta / fotos de antonio ferroni LA TECNOLOGÍA LOS LLEVÓ A ENAMORARSE DE LA HISTORIA. Santiago Viaña (colegio Pucará) y Romina Tejerina (colegio Carlos Pellegrini). la gaceta / fotos de antonio ferroni LA GACETA / FOTOS DE ANTONIO FERRONI

“Está bueno que incluyan la historia de Tucumán en las escuelas. Muchos chicos desconocen sus raíces y así se van olvidando las costumbres. A mí me pasó que no tenía idea de que existía una artesanía que se llama randa. Para mí eso es patrimonio vivo, muy valioso, que corre riesgo de desaparecer si la gente lo olvida”. Lo dice con frescura, Romina Tejerina, de 17 años, del colegio Carlos Pellegrini, ganadora del Segundo Premio en la Olimpíada Nacional de Historia, que organiza la Universidad del Litoral, de Santa Fe.

Al certamen también fueron los ganadores provinciales Fermín Cossio, de 17 años, del Colegio del Sol, y Santiago Viaña, de 15 años, del colegio Pucará. Los tres compitieron entre 370 alumnos finalistas sobre un total de 10.600 chicos de todo el país que participaron en la olimpíada que se realiza todos los años. Capitalismo y revolución industrial, sociedades pre capitalistas, Edad Media, colonialismo en África, sociedades antiguas recolectoras y sociedades esclavistas fueron algunos de los temas que les tocó contestar.

La decisión de imponer por ley la enseñanza de la historia en todos los niveles y modalidades de la Educación (ver nota aparte) fue recibido con satisfacción, pero también con reservas por los ganadores y por una profesora que también viajó al certamen. “La idea es genial, pero no podés obligar a nadie a que le guste la Historia. Tiene que ser optativa. Tiene que ser como en la facultad, que podés elegir”, opina Santiago.

“A mí me parece bien que se enseñe historia, siempre que el material no sea adoctrinador. Porque la clase política puede modificar la historia en ciertos aspectos diminutos, o no, y terminar por dar una imagen totalmente opuesta a la realidad. La historia tiene que ser objetiva”, opina Fermín. “Por lo menos, habría que mostrar que puede haber miradas distintas con respecto a un hecho. Dar la posibilidad de que el alumno pueda consultar a otros autores y generar la inquietud de que vayan a buscar otras miradas para que no se manipule la historia, como sería enseñar una sola parte o con un sesgo determinado”, interviene la docente María Indiana Garat, que acompañó a Fermín en la olimpíada.

La profesora de Historia aclara que no sabe cómo se implementará la normativa, “pero si la idea es enseñar la historia de Tucumán en todas las asignaturas, -dice- a mí eso no me parece tan bueno. Porque la historia es una ciencia. Para enseñar historia hay que haber estudiado y haberse formado en historia. Porque si a esta disciplina la aborda un docente no especializado corremos el riesgo de que se convierta en un relato, en una crónica vacía de contenido. La historia no es eso, es la interpretación de los hechos y las miradas diversas que se pueden tener de esa interpretación, desde las distintas posturas ideológicas y sociales. Esto se llama multiperspectividad. Esa formación y esa mirada diversa, con amplitud de criterio, se las adquiere estudiando historia. Entonces no me parece que se pueda enseñar sin haberse formado, como no me parece que se pueda enseñar ninguna ciencia sin haber estudiado”, opina la docente.

GANADOR. Fermín Cossio (17 años), del colegio del Sol, en LA GACETA. GANADOR. Fermín Cossio (17 años), del colegio del Sol, en LA GACETA.

“A veces tengo la impresión de que muchos piensan que la historia es un cuento. Muchos papás lo dicen en realidad: ‘yo le digo a mi hijo que estudie, si es es un cuento la historia’. Y no es así, es una ciencia. Hay muchos conceptos mal enseñados o aprendidos de memoria. Cuando esto ocurre el chico no encuentra placer en el aprendizaje porque tampoco encuentra sentido”, argumenta.

Las nuevas tecnologías

Romina y Santiago agregan que incorporar la tecnología en la enseñanza de la historia sería un gran punto a favor del interés de los alumnos.

“A mí me encantan los juegos de estrategia. Aprendí conceptos de la II Guerra Mundial con Battlefield. Conozco la historia de los Estados Unidos por los juegos. Se pueden encontrar batallas verdaderas y participar como soldado, aunque sin morirte nunca”, ríe Santiago.

Romina cuenta que aprendió mucho en el canal de Paka Paka. “Cuando era chiquita veía los dibujitos de ‘La asombrosa excursión de Zamba’ o la serie de Historias Horribles, de la BBC, que contaba lo que los manuales no te dicen”. Ahora Romina no mira TV. Leer libros de historia está en el listado de sus actividades favoritas.

Ya es ley provincial: la historia de Tucumán deberá enseñarse en todas las escuelas y todos los años

La Legislatura de Tucumán aprobó por unanimidad la ley que establece la incorporación de la historia y la cultura de Tucumán en la currícula de todos los niveles educativos de establecimientos públicos y privados. La iniciativa fue impulsada por el ministro Juan Pablo Lichtmajer, a través del legislador Gerónimo Vargas Aignasse, autor del proyecto, que contó con el apoyo de la comisión de Educación y Cultura. La norma establece que el aprendizaje de la historia y la cultura de Tucumán sea obligatorio desde 2020 y de manera gradual. Las escuelas deben ver de qué manera ofrecen el contenido desde los distintos espacios curriculares.

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