05 Noviembre 2019
POSITIVO. Fernández ponderó sus coincidencias con el presidente López Obrador y el apoyo del país azteca. Reuters
El presidente electo, Alberto Fernández, se reunió ayer con el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, en el marco de la primera gira que realiza luego de derrotar a Mauricio Macri en las elecciones del 27 de octubre pasado.
El tema central que trataron Fernández y López Obrador fue económico, con la intención de dar una fuerte señal política de alineamiento dentro del polo de centroizquierda en el que se alinean gobernantes y políticos latinoamericanos, denominado Grupo de Puebla.
Fernández fue recibido en la entrada del palacio gubernamental por el vicecanciller mexicano, Maximiliano Reyes, y un pequeño grupo de argentinos lo aplaudió cuando se dirigía hacia la portada de acceso.
López Obrador le pidió a su próximo par argentino acelerar la “recuperación del comercio bilateral”, por lo que el diputado Felipe Solá y los economistas Matías Kulfas y Cecilia Todesca, que acompañaron a Fernández, se reunieron desde muy temprano con autoridades del Gobierno mexicano.
El mercado automotor, y productos tradicionales argentinos como la carne y hasta los porotos negros que cultivan las provincias del Norte Argentino serán parte del comienzo de la negociación destinada, según Solá, a intentar revertir una balanza negativa de U$S 900 millones.
Ampliación
Primero en la reunión a solas, y a continuación en el almuerzo, Fernández y López Obrador hablaron sobre la posibilidad de ampliar el acuerdo de complementación comercial ya vigente, aunque el Presidente mexicano deberá enfrentar no poca oposición interna para avanzar en ese convenio. Entre quienes ya se quejan están los ganaderos mexicanos, temerosos de perder mercados con el eventual ingreso de carne argentina a México.
Solá, uno de los candidatos a ocupar la Cancillería en el próximo gobierno de Fernández, aseguró que la apuesta ahora es “abrir una relación bilateral diferente en todos los sentidos” con México.
Apuntó que esta expectativa se sustenta en que el presidente López Obrador, “genera la posibilidad de una línea con América del Sur que no existía en México con anteriores administraciones, y eso es importante”.
Conferencia
Luego, en una conferencia de prensa, Fernández señaló que “el 10 de diciembre no es una fecha mágica; ese día cambia un gobierno, no la realidad económica”. Así se refirió a pregunta si en su gestión se mantendrán los controles de cambio impuestos después de la derrota electoral de Macri el 27 de octubre pasado.
Sobre la negociación con el FMI por la deuda Argentina, indicó que no habrá más ajustes “a costa de más pobreza”, y que López Obrador prometió su apoyo en “todo lo que necesite la Argentina”. Y agregó: “es un gran punto de arranque; me voy muy contento porque tenemos muchas cosas en común”.
También adelantó Fernández que habrá una revisión de las tarifas, ya que “Argentina no puede tener las tarifas dolarizadas cuando el resto de la economía no lo está”. Si bien no confirmó si habrá un congelamiento de tarifas, adelantó que “todos y todas deberán hacer un esfuerzo; cuando digo todas me refiero a las empresas energéticas”, aclaró. (Infobae/iProfesional)
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