Cartas de lectores
15 Noviembre 2018

NOTICIAS DE PORTADA

Quiero, primero, expresar mi placer en leer todos los días LA GACETA, este prestigioso diario, al punto de afirmar que soy “GACETA-dependiente”. Y, obviamente, comprendo que hay especialistas en el diario que deciden qué se publica, cómo y dónde. Y los respeto. Me encantó en la edición de hoy, 14 de noviembre (por ayer), la Chispa de Calliera, acerca de la naturaleza de la pelea José Jorge Alperovich-Juan Manzur, para saber dónde correspondía publicársela. No tengo su genial sentido del humor, pero sí me pregunto sobre la naturaleza del problemático casamiento del gobernador de Jujuy (Gerardo Morales) y la que se convertiría en primera dama de esa provincia.¿Es de verdad un asunto que impactará fuertemente en la economía o política de un país envuelto en una crisis tremenda, como para ser publicado en primera página? ¿O no se parece más a un “culebrón”, o a chimentos de la vida de los famosos? No veo la trascendencia de un hecho de estas características... salvo para sus protagonistas. El pueblo está angustiado por problemas vitales. ¿O será un buen método distraerlos con estas noticias tan triviales? Cuando se escriba la historia de estos días tan aciagos... ¿aparecerá por ahí un documento sobre esta “historia de amor” como documento de época? Mmm... lo dudo. Es mi opinión, por supuesto. Pero no podía dejar de expresarla.

María Estela López Chehín

N. de la R.: Se trata de un conflicto que involucra al mismo gobernador de Jujuy -una persona pública cuyas acciones importan y pueden afectar a la sociedad- y en el que se ven mezcladas también instituciones como la Justicia de Jujuy y de Tucumán y personas de nuestra provincia. LA GACETA debe informar sobre ese conflicto a la comunidad. Agradecemos el aporte y la reflexión de la lectora.

INTERESES DE "LELIQ”

Vengo escuchando estos últimos días, en algunos medios críticos del gobierno de Macri, que se está pagando con la plata de nuestros impuestos la escandalosa suma de $ 1.000 millones, solamente en intereses por las Leliq (Letras de Liquidez) emitidas por el BCRA (Banco Central de la República Argentina). La verdad es que me cuesta creer que esto sea cierto, ya que estaríamos hablando de una suma que equivale, por ejemplo, a la construcción de unas 1.000 pequeñas viviendas por día (sí, ¡por día!), o a un tercio del subsidio que recibe Aerolíneas Argentinas en todo un año (algo que por estos días preocupa mucho a Macri), o a unas cuantas escuelas u hospitales que se podrían construir diariamente. Me parece que esta es una nueva “campaña del miedo” iniciada por los “kukas” para debilitar al Gobierno. Por ello, me gustaría que algún dirigente de Cambiemos en Tucumán aproveche este espacio y desmienta esta información, y así llevar tranquilidad a la ciudadanía de que este despilfarro no es cierto. Si no lo hacen, no quedará otra que pensar que la información es veraz y, por lo tanto, concluir que la plata de todos los argentinos se está dilapidando por parte del gobierno de Macri. Es una alarmante cifra de $ 1.000 millones, diarios, para beneficio de bancos y financieras que son quienes están facultados a adquirir las mencionadas “letras”. Me imagino que, en caso de que esto sea cierto, se generará una tremenda indignación en aquellos que antes solían indignarse, porque con la plata de sus impuestos se pagaban planes sociales u otros subsidios, ya que ahora se estaría destinando para incrementar las millonarias ganancias de bancos e inversores. ¿O esto no les indigna?

Oscar Alberto Beltrán

UNA MADEJA ENREDADA

Basta de hacerse los desentendidos, o los importantes visitando el primer mundo. A ellos no les importamos. Aquí esta el primer mundo que deben cuidar y desarrollar. ¡No lo olviden! ¿Acaso a todo el mundo les gusta demorarse en los aeropuertos para esperar días y luego volar; quizás son parientes de los sindicalistas de los siete gremios de los aviones? ¿Cuál es el problema de ustedes, señores Gobierno, no quieren, no pueden o no les importa? Está a la vista la cantidad de cosas y alimentos para vender, pero no se dan cuenta de que la mitad de los argentinos no tiene ni un peso para comer todos los días. Hagan un examen de conciencia; es todo lo que necesitan. El cómo, es ahora; la cuestión, luego de un diagnóstico de la actualidad, todos la sufrimos o gozamos, según en qué lugar nos encuentre alguien en este tiempo. Disminuyendo el efectivo en circulación, no es un remedio que ahora tenga resultado. Igual, al incremento de impuestos directos tomados sobre valores inflacionados. Los precios, a pesar de la disminución de la demanda, no bajan. No bajarán, eso ya ocurrió y es una muestra a tener en cuenta. El dinero existente, y el que pueden liberar los bancos, no está disponible por los altos intereses actuales; ese interés colocado por el Banco Central, con anuencia del Poder Ejecutivo mal asesorado. Bajarlo es sólo una medida para permitir el crecimiento de las pequeñas y medianas industrias y, además, la colocación de préstamos para activar la construcción y la veta de todo tipo de automóviles y productos duraderos. En poco tiempo se alcanzará el equilibrio en los ingresos y precios, pero la activación debe partir del Estado, que tiene la obligación de seguir construyendo, pero no obras duraderas de corto plazo, sino grandes obras porque tenemos riqueza y capacidad para terminar con el problema de educación y salud, comenzando por edificios acordes a estos tiempos, escuelas, hospitales con grandes y modernas instalaciones, no escatimar recursos y controlar la calidad. De igual modo, actualizar comisarías, cárceles, y otras obras. Sólo algo así, no más como para llenar un vacío, pero hace falta algo más; es tiempo de hacerlo bien. Basta de medias tintas, tenemos los medios, ejecuten de una buena vez un gobierno poderoso y en desarrollo que perdure. Y queda aún tanto por hacer. Hace falta poner coraje y promover justicia, que los trabajadores puedan actuar tranquilos, y de esa forma habrá más puestos de trabajo, no con huelgas inútiles.

Carmelo J. Felice

MANIPULAR SOCIEDADES

LA GACETA publicó tiempo atrás un comentario de Yubal Harari, donde señala que la tecnología de la información brindará a las corporaciones nuevas herramientas para manipular sociedades. Esto viene de siglos. En el terreno de la política, están de moda los “trolls” y las noticias falsas. No importan los elementos que se usen, sino la materia (cerebro o “marote”). Hay que estar alertas. Alimentando neuronas que tengan libertad, como el viento y el volar de los pájaros; buena lectura, y escuchar toda la música posible, nos protegerán del flagelo. El poder real (corporaciones económicas) debería usar aquellas herramientas para desarrollar buenos sentimientos y buenas intenciones en las personas. La vida y el mundo serían más bellos. Los utópicos, desde ya, ¡agradecidos! En este menester de lidiar con los que manipulan y los manipulados (estos últimos claramente con el “síndrome de Estocolmo”), ¿llegamos? al hoy. El FMI (Fondo Monetario Internacional) ordena ajustes. ¡Vaya con la soberanía!, y los CEO de la corporación nacional (Gobierno nacional) concretan un brutal despojo a los trabajadores. Cumplen a rajatabla, y perfectamente, un proyecto al que llaman “crisis” y culpan a la “herencia recibida”. Académicos (¿hinchas de Racing Club?), instando a estar “esperanzados” (LA GACETA 19/10). Van más atrás todavía y expresan: “Argentina está hipotecada con el fracaso, en la medida que tiene deudas contraídas e impagas desde el momento fundacional”. ¡Já! Hasta donde sé, el pueblo argentino pagó todo, si hasta se hizo cargo, en el año 1982, de la deuda del Grupo Socma (de la familia Macri). ¡Qué tal! Desmemoriado el intelectual que, ante las primeras medidas tomadas por los CEO (quita de retenciones, subas de tarifas, pago a los buitres, cierre de fábricas, nuevos endeudamientos, etcétera) aconsejaba “paciencia”. En LA GACETA (28/10) se titula: “Los multimillonarios del mundo cada vez son más ricos. El auge de las bolsas, suba de precios inmobiliarios, servicios financieros (timba), etcétera, hicieron crecer su fortuna”. Busqué en la publicación mencionada algún dato que indique si ese incremento de la riqueza provenía de la apertura de fábricas, de generar trabajo, etcétera. En vano, nada encontré. Mi ignota mirada, siempre estará dirigida a ese sector ¿humano? llamado capitalismo, neoliberalismo, que aporta en blanco o en negro para campañas políticas un 1%, y recauda el 99%, que explota, depreda, contamina, evade impuestos. Ya fugaron U$S 24.000 millones al exterior. Todo obra, toda mejora que la gente reclama al Estado (educación, salud pública, seguridad), se hace con dinero, señores, y esa plata está de vacaciones en paraísos fiscales. Pero... ¿de qué estoy hablando, para qué molestar con estos “temitas”? Nuestra dignidad, nuestro bienestar es “bicoca” (cosa que se considera buena y que se consigue por poco dinero o con poco esfuerzo), comparado con el clásico por la Copa Libertadores.

Hugo Vallejo

Manuel Estrada 3.850
San Miguel de Tucumán

“EL MAL DEL QUEBRACHO”

El destacado investigador y escritor Orestes Di Lullo nos dejó incontables páginas sobre la tradición rural santiagueña, y entre tantas, la historia de “El mal del quebracho”, que se asemeja con las actuales controversias surgidas sobre el machismo y el feminismo. Narra que un paisano nativo tenía una mujer que sólo pensaba en su belleza y no lo atendía como corresponde, lo que lo indujo, mediante engaños, proceder a atarla junto al tronco de un quebracho colorado para dejarla abandonada, y a las pocas horas comenzó a hincharse y aparecerle ronchas rojas en su cuerpo, producto del mal aire que produce la sombra de esta planta. La mujer, viéndose así, lloró amargamente y prometió no ser tan vanidosa, al tiempo que el marido regresó para desatarla y perdonarla. Conocido el mal que ocasiona este árbol, apareció algún cultor de las santas curas recetando hacer una tortilla de ceniza atada con una cinta roja, que se coloca al pie del quebracho, prometiendo dedicación y amor duradero. O también se inmuniza contra la flechada de este alérgico árbol, saludándolo todos los días con el mayor respeto, diciéndole ¡Buenos días señor quebracho! Como testimonio de esta historia, es que en las cercanías de El Arenal, departamento Jiménez (provincia de Santiago del Estero), existe un paraje que se llama “El quebracho”, donde hubo un corpulento ejemplar de esta especie que, al decir de los antiguos lugareños de esa región, a partir de ese episodio “siempre estaba rodeado de tortillas de ceniza” con su cinta colorada. Luego de leer esta nota costumbrista, que machistas y feministas saquen sus propias conclusiones de esta apasionante y sempiterna cuestión, que es “según el cristal conque se mire”.

Ysmael Díaz

Mario Bravo 247
Banda del Río Salí

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