Mafalda, desde que nació hasta en la sopa

INAUGURA HOY

• A las 20, en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265).

Mafalda no es sólo la historieta o el libro; tampoco sus profusas imágenes contestatarias ni su vida del barrio, con sus amigos y familia. El personaje de Quino (Joaquín Lavado) es en sí mismo un mundo en el que, a fuerza de inteligencia y metáfora, sentido común y visión crítica, se construyen relaciones que escapan al papel y se plantean en la vida cotidiana.

La muestra “Mafalda en su Sopa”, está producida por el propio Quino, la Biblioteca Nacional Mariano Moreno (a través de su Archivo de Historieta y Humor Gráfico Argentinos) y, en la versión local, por la Secretaría de Extensión de la UNT. La exposición se creó al cumplirse 50 años de aparición de la tira (comenzó en 1964) y tuvo distintos recorridos por todo el país. Esta noche llega al Centro Cultural Virla con instalaciones, un mural, imágenes en las que no faltan los bocetos de Quino, cartas de admiradores al autor y fotos de los grafittis pintados en las calles con la niña rebelde. Habrá un tributo especial de artistas locales, como Cesar Carrizo, Néstor Martín, Sejo Delgado, Lucio Mauroyikris, Lucía Felipe y Fabián Castro, entre muchos otros.

“Mafalda en su Sopa” reconstruye el proceso de producción, difusión y circulación de la tira más emblemática del humor gráfico nacional. “Nos marcó a casi todos en algún momento de la vida. La exposición trata de indagar a la vez en el reverso de esa trama: no se trata sólo de reconstruir la hechura ‘Mafalda’ sino también de analizar qué hicimos de ella nosotros, día a día y calle a calle, a lo largo de más de medio siglo”, afirma la curadora de la muestra, Judith Gociol. “A diferencia de otras exposiciones, esta está pensada desde qué les pasaba a los lectores con Mafalda. Sorprende la actualidad de sus chistes”, describe Mariángeles Metivié, del área patrimonial de la Universidad de Paraná.

La directora del Virla, Virginia Ríos, expresa su orgullo por esta exposición y señala su doble valor, artístico y educativo. “Mafalda representa la argentinidad, pero fundamentalmente, representa los mejores valores y los mejores principios”, añadió respecto de un personaje que acompañó desde la infancia a distintas generaciones en todo el mundo, que creció entre las familias y provocó la risa, muchas veces para no cejar ante una realidad hostil, pero también impulsó a pensar críticamente.