Trajes de baño: se viene un verano con diseños tucumanos

Hace años dejó de ser un simple traje de baño. Ya es una prenda de vestir que trae consigo desde arte, emoción y hasta el estilo de una década. Diseñadores tucumanos de bikinis, mallas enterizas y shorts de baño coinciden en que había pocas propuestas, por lo que se dejaron llevar por sus propias necesidades y búsquedas para ponerle color y algo de ellos al verano.

Ingrid Wagner quería transmitir el arte a un traje de baño, porque eso no existía en el mercado. Es que esta tucumana pasa sus días entre pinceladas, poniéndole color a todo: a murales, a esculturas, a cuadros y a su negocio, al que bautizó “Wi”. Entonces, eso que hace a diario lo plasmó en bikinis y enterizas, cuya marca lleva el mismo nombre que su tienda. “Ir al mar o a una pileta y ponerse una bikini es presentarse ante el mundo de alguna manera, y estás casi desnuda. Entonces, es importante que ese traje de baño te dé seguridad, que te haga sentir cómoda. En eso pensamos con mi equipo de trabajo”, comenta Wagner.

Su primera colección fue lanzada en septiembre y la llamó “Madonna”. Mientras que a fines de noviembre presentará “Katy Perry”. “Lanzaremos por temporada dos colecciones, que llevan el nombre de cantantes. Cada estampa fue bautizada con una de sus canciones. Esta es una marca lúdica, divertida, porque queremos que genere alegría. Lo mismo que genera el arte. La aceptación fue increíble”, describe.

En cuanto a las tendencias, Wagner las incluyó en sus colecciones: son las enterizas cavadas, con colaless y los tops. Otra de las cualidades que señala la artista y diseñadora es que son piezas que se han pensado en todos sus detalles: “nos preocupamos por todo, desde las bolsitas hasta el packaging. Son productos de primera calidad, números limitados y accesibles. Todo está relacionado para que le genere alegría al que la reciba”.

Los precios arrancan en: $ 1.200 las bikinis, $ 1.100 las enterizas y también se venden la piezas por separado, desde $ 500, tanto en su local como en el sitio web www.tiendawi.com.ar, que envía a domicilio.

Con este concepto, de crear piezas únicas y con diseño, la DJ tucumana Karina Llenes creó su propia colección: “la gente no ve la biquini sólo para ir a la pileta”. Bikinis Karr nació en 2014 (tiene un sitio en internet y en Facebook), con la ayuda de los padres de Karina, también diseñadores: Fredesvinda Denis (diseñadora de interiores) y Marcelo Llenes (diseñador gráfico). “Primero busqué fábricas, y encontré una flexible para poder diseñar libremente. También conseguí un lugar donde me estampan las telas y se comprometieron a darme la exclusividad. Me gustó eso: tener la exclusividad del producto para que mis clientas se sientan especiales, con una bikini única”, comentó la diseñadora. Su colección se destaca por los colores vibrantes, la mezcla de estampas, y el aire retro de algunos de los diseños, como el talle alto y el escote corazón.

Para esta temporada Bikinis Karr incluyó tres modelos distintos de bombacha de tiro alto, más enterizas (“es lo que más usan ahora y de todas las edades”) y continúa con los colores y la cantidad de diseños limitados.

Los precios arrancan en: $ 300 las bombachas, $ 480 los corpiños, aunque el costo depende del diseño.

Por las redes

En Instagram abundan las cuentas tucumanas de distribuidoras de trajes de baño, que compran los productos en mayoristas o directamente en fábricas, a las que -la mayoría de las veces- les piden la exclusividad de ventas en nuestra provincia. Niza Swimwear, por ejemplo, es un emprendimiento de dos amigas tucumanas que para lograr la independencia económica familiar invirtieron en trajes de baño para hombres y mujeres. También consideraban que las propuestas tucumanas no eran variadas, y mucho menos para los hombres

Los diseños de Niza Swimwear para ellos son short cortos con estampas de tucanes, búlgaros, rayas y aviones de papel, entre otros. Destacan que la tendencia son los shorts cada vez más cortos y que no tienen límite de edad. Para ellas también incluyen las tendencias para este verano: mallas enterizas y lisas, al estilo Baywatch (bien cavadas); tops y corpiños con cordones cruzados.

Los trajes de baño para hombres arrancan en $ 500 y para las mujeres desde $ 700 a $ 950. También venden las piezas por separado.