BIRMINHGAM. En la tercera fecha del Mundial de Inglaterra, Australia, Irlanda y Escocia quedaron hermanados. Por la similitud de sus respectivas victorias, la fraternidad victoriosa les puso el sello de trillizos. Además de ganar, los tres golearon y son punteros de sus grupos. Los australianos vencieron a Uruguay por 65-3, Escocia aplastó a Estados Unidos 39-16 y los irlandeses humillaron a Rumania por 44-10.
Los “wallabies” consiguieron 11 tries. Australia, en el calificado como “grupo de la muerte”, llegará a las dos últimas jornadas llena de moral. La selección oceánica, una de las favoritas al título, se medirá el próximo sábado a una Inglaterra que está contra las cuerdas y siete días después se enfrentará a Gales que por la victoria ante los locales sueña con un regreso tardío a casa. La diferencia de 62 puntos que sufrieron los uruguayos, últimos en el grupo, fue acorde a la desproporción entre jugadores profesionales y amateurs: Uruguay tiene sólo cuatro rentados. Igual de implacable que Australia, fue Irlanda que le propinó 34 puntos de diferencia a Rumania que a los 10 minutos ya no tuvo reacción alguna y sigue sin sumar puntos. La victoria de la selección del trébol en Wembley provocó un daño colateral para Los Pumas. Hasta ayer el partido entre Argentina y Nueva Zelanda podía florearse como el más visto en un Mundial con 89.019 espectadores, pero fue superado por las 89.267 personas que convocaron irlandeses y rumanos en el mismo estadio.
Para buscar complicaciones en alguna de las victorias, hay que hacer un trabajo fino. Aunque sacó 23 puntos de distancia, Escocia se lleva el primer puesto en cuanto al podio de dificultades se refiere ya que fue el único equipo que se fue al entretiempo en desventaja ante Estados Unidos. Después todo fue como lo de sus hermanos en victoria: se distanció ampliamente en el marcador, sumó el punto bonus y es líder de la zona B. (DPA-Especial)