Liberan a dos represores condenados

Liberan a dos represores condenados

Casación hizo lugar a un recurso presentado por las defensas de Lazarte y Ledesma El ex militar y el ex guardicárcel habían recibido penas en diciembre. Fallo similar al de “Arsenals II-Jefatura II”.

15 Febrero 2015
La Cámara Federal de Casación Penal dispuso durante la feria judicial que dos de los 10 condenados en la megacausa “Villa Urquiza” recuperen su libertad mientras se discute la sentencia del Tribunal Oral Federal (TOF) local. Los jueces Ana María Figueroa (voto en disidencia), Eduardo Riggi y Ángela Ledesma hicieron lugar a un recurso interpuesto por los defensores oficiales Adolfo Bertini y Manuel Bonnin. De esta manera, Jorge Omar Lazarte y Francisco Alfredo Ledesma quedarán excarcelados hasta tanto la sentencia quede firme. La definición alcanzaba también al multicondenado Roberto “El Tuerto” Albornoz, pero seguirá en la penitenciaría porque cumple condena firme por el caso “Romero Niklison”.

El ex militar Lazarte-condenado también en la megacausa “Arsenales II- Jefatura II”- y el ex guardiacárcel Ledesma habían recibido 18 años y 16 años, respectivamente, al ser encontrados responsables de crímenes de lesa humanidad.

Los jueces del TOF Carlos Jiménez Montilla, Gabriel Casas y Juan Carlos Reynaga habían incluido un punto clave en el fallo dictado el 23 de diciembre: había revocado las prisiones domiciliarias y excarcelaciones y dispuesto que nueve de los penados sean alojados en Villa Urquiza hasta tanto la sentencia quedara firme.

Este es el apartado anulado por Casación. Dos de los jueces - Riggi y Figueroa- habían intervenido también en un recurso presentado por el defensor oficial Ciro Lo Pinto por la megacausa “Arsenales II-Jefatura II”. En ese entonces, habían decidido que 30 represores condenados quedaran en libertad o bajo arresto domiciliario (Figueroa había votado en disidencia parcial).

“Villa Urquiza” fue el décimo juicio por delitos de lesa humanidad celebrado en Tucumán.

Se determinó que ,bajo la fachada de la cárcel, entre 1974 y 1983 funcionó uno de los centros clandestinos de detención más cruentos de Tucumán. Fueron alojados allí presos políticos y los “subversivos”, como los llamaban los represores. La mayoría de las 39 víctimas pudo declarar. Se juzgaron los asesinatos de Juan Carlos Suter (julio 1976) y José Torrente (mayo de 1976) y el paso por el penal de tres desaparecidos.

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