La huella de la gran escultora tucumana en Jujuy

La huella de la gran escultora tucumana en Jujuy

IMPRONTA. “La Justicia”, de Lola Mora, en la Casa de Gobierno jujeña. IMPRONTA. “La Justicia”, de Lola Mora, en la Casa de Gobierno jujeña.
02 Febrero 2014

ARTE

LOLA MORA DE HERNÁNDEZ EN JUJUY

NÉSTOR JOSÉ YSILVIA REY CAMPERO

(Ideas Nuevas - Jujuy) 

Mucho se ha escrito sobre la vida y obra de la extraordinaria Lola Mora. Esta obra complementa esa producción, reflejando su impronta en Jujuy .

Sus autores, la profesora Silvia Rey Campero y el arquitecto Néstor José, señalan que el libro “pretende saldar la deuda que tienen los jujeños con una figura tan fuerte y carismática como Lola Mora. Hacer conocer y transitar las huellas de su vida y de su obra dejadas en nuestra provincia”.

Lo cierto es que el volumen cumple ese objetivo ampliamente. Indaga tanto en los orígenes, la formación artística en el país y en Europa, y la personalidad notable de la escultora, como en las numerosas obras realizadas. Especialmente, desde ya, las que adornan la Casa de Gobierno de Jujuy y otros emplaces.

De esta manera, la provincia de Jujuy, y particularmente su capital, son depositarios de seis creaciones de la escultora: “La Paz” , “La Justicia”, “El Progreso”, “La Libertad”, “El Trabajo” y “Los Leones”.

La itinerancia de estas espléndidas obras inauguradas frente al nuevo Congreso Nacional en mayo de 1906, fueron luego cuestionadas, desprestigiadas artísticamente y enviadas al exilio, del que fueron rescatadas gracias a gestiones de los legisladores jujeños. Su emplazamiento, su mantenimiento, la interpretación acertada de detalles artísticos observables en fotografías de espléndida factura de Joaquín Carrillo, Quemel Temer, Rodríguez Bárcena y N. José.

Todo está allí, hasta un poema de la escritora Susana Quiroga dedicado a Lola Mora.

En definitiva, un libro de calidad -realizado con la dedicación y el esfuerzo de muchos años- que, como en un rompecabezas encomiable, hace un valioso aporte al estudio de la obra de la gran escultora.

© LA GACETA
Horacio Semeraro

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