Atribuyen intención política y delictiva a los saqueadores

Atribuyen intención política y delictiva a los saqueadores

La Gendarmería refuerza la seguridad en los supermercados y en la ciudad patagónica. El Gobierno de Río Negro identificó al grupo que sería responsable de los hechos vandálicos. D'Elía involucró a la UCR. No hay detenidos.

CON LAS MANOS EN LA MASA. Los encapuchados se llevaron LCD (televisores) en los changuitos. REUTERS CON LAS MANOS EN LA MASA. Los encapuchados se llevaron LCD (televisores) en los changuitos. REUTERS
21 Diciembre 2012
RÍO NEGRO.- Los saqueos a dos supermercados y otros negocios en San Carlos de Bariloche dispararon ayer el recuerdo de las imágenes de similares hechos en 2001. Entonces -también era tiempo de fiestas navideñas- la situación social-económica y política en el país era muy diferente. La crisis económica asfixiaba a la sociedad, sobre todo a los sectores bajos, y retumbaban los cacelorazos y el pedido de que "se vayan todos" los políticos.

En el caso de ayer, el Gobierno de Río Negro repudió los ataques y denunció que este accionar no es consecuencia de una situación social, sino a una cuestión política con visos delictivos. Señaló que durante los desmanes de ayer se apropiaron en su mayoría de electrodomésticos y televisores de alta gama -también de bicicletas y ropa- antes que artículos y alimentos de primera necesidad.

Según el gobierno de Alberto Weretilneck, los saqueos a las sucursales de los supermercados Chango Más y Todo fueron perpetrados por "integrantes de organizaciones políticas anárquicas que vienen extorsionando con este tipo de acciones a las distintas autoridades".

Y acusó directamente -en un comunicado- a integrantes de una familia local, de apellido Boneffoi, de quienes dijo que "están vinculados a este tipo de organizaciones delictivas y relacionados con varias causas judiciales y hechos de violencia".

En coincidencia, el senador rionegrino del FpV, Miguel Pichetto, responsabilizó por los saqueos a "grupos duros con posiciones anarquistas" y origen en la "extrema izquierda", que poseen "características delictivas".

Por su parte, el dirigente piquetero oficialista Luis D'Elía, culpó al grupo de ex presos 1° de Mayo (anarco-basista), "alentados por la UCR", de ser autores de los saqueos.

El intendente de Bariloche, Carlos Goye, se encontraba en la Capital Federal cuando ocurrieron los actos vandálicos.

Los hechos
Poco antes de las 10, decenas de personas encapuchadas que habían llegaron hasta los accesos del supermercado Chango Más (de la cadena WalMart, rompieron las rejas que habían sido bajadas e ingresaron en forma violenta lanzando piedras y palos, y saquearon y destrozaron el local. Se llevaron artículos de electrónica y comestibles.

En el momento de los saqueos, la policía se apersonó en la zona, pero se mantuvo al margen de las acciones durante las primeras horas, con la orden de "contener pero no intervenir".

Poco después, se generó una batalla campal que incluyó agua, gases, piedrazos y hasta autos incendiados en las inmediaciones. Los efectivos intentaron evitar el asalto al supermercado con palos de hockey que encontraron en el comercio y con piedras y palos, los mismos elementos que lanzaron los saqueadores. "Fuimos sobrepasados", admitió un policía. No había más de 15 efectivos cuando comenzó el hecho.

Esta ausencia de control impulsó a que un grupo aun más grande volviera a incursionar en el supermercado extrayendo más artículos de consumo incluso de la bodega del comercio. Los clientes de Chango Mas que se encontraban dentro del edificio fueron evacuados por una puerta lateral. El raíd de saqueos siguió en las horas siguientes por los negocios de la zona, como minimarkets y carnicerías. Luego, dos supermercados más de la cadena "Todo" fueron saqueados y se llevaron, en su gran mayoría, comida y alcohol.

Tres horas después del inicio de los saqueos, policías con escudos, cascos y otros elementos de protección llegaron al local y lograron retirar a las personas encapuchadas que cargaban los objetos robados y que habían vuelto al supermercado para llevarse lo que quedaba. No hubo detenidos pero sí 20 policías y al menos 17 civiles heridos. (DyN)

Comentarios