Vivas a los próceres y risas con la langosta

Vivas a los próceres y risas con la langosta

Tras la misa, la Municipalidad prometió un regalo impactante para el público. Entonces comenzó el mapping, una proyección en 3D sobre la fachada de la Catedral, que repasó desde el Éxodo Jujeño hasta el homenaje de Belgrano a la Virgen de la Merced. No todos pudieron verlo desde ubicaciones cómodas, pero el aplauso final fue largo y conmovido.

LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
25 Septiembre 2012
- ¡Eh, chica! ¡Bajate de ese banco! ¿No ves que nos tapás?

- ¡Soy petisa! ¡No puedo ver si no me paro aquí!

- ¡Qué nos importa! ¡Queremos ver todos!

Pasadas las 20.30, los gritos se sentían más que el calor en el ala sudeste de la plaza Independencia. La misa había terminado y una locutora había pedido al gentío que se mantuviera en sus lugares porque la Municipalidad estaba a punto de sorprenderlos "con una muestra impactante". Pero los árboles y algunos de los asistentes que a último momento decidieron pararse en las sillas plásticas hacían prever que el espectáculo no era para todos.

Las protestas rebotaron en medio del apagón que se exigió para dar comienzo al mapping, una proyección de imágenes en 3D sobre la fachada de la Catedral que integra los desniveles y aberturas del edificio de modo que parece que el frente se mueve o que va mutando de formas y colores. Cuando la película empezó, sin embargo, el público cerró la boca y abrió grandes los ojos. Frente a ellos las columnas de la iglesia se convertían en inmensos pianos que musicalizaban la secuencia, luego en el marco en el que el Ejército de Tucumán dio pelea a los realistas, más tarde en los coloridos recipientes de flores de lapachos, rosas y amarillas.

El guión lo contempló todo: desde el Éxodo Jujeño, que proveyó 800 hombres a las filas del general Manuel Belgrano; la orden del Triunvirato de no dar batalla y bajar a Córdoba; el enfrentamiento en sí; la lluvia de langostas; y el encuentro final entre el prócer y la Virgen de La Merced. La secuencia, a cargo de la productora TGP Group, duró 12 minutos y para exhibirla se necesitaron cinco proyectores.

Langostas y logo

El mapping, que más que un relato fue un punteado de los acontecimientos históricos, tuvo momentos emotivos. Los primeros vinieron de la mano de las voces en off, que emulaban a los próceres de la Batalla arengando al pueblo con frases como "ha llegado la hora" o "Tucumán no se entrega". En la pared se mostraban, en tanto, los rostros de los líderes que encabezaron la gesta.

También fue emblemática la escena de la invasión de langostas (con miles de insectos ennegreciendo el frente de la Catedral), un fenómeno que, aunque no ocurrió, fue incluido por sugerencia del historiador tucumano Luis Yanicelli para preservar el inconsciente colectivo. Causó algunas risas, empero, una langosta gigante que ocupó toda la pared y miró al público, con la que finalizó la secuencia.

Pero el momento más conmovedor fue la aparición de la Virgen, ante quien Belgrano se hinca, agradecido por su intervención. Eran ya los segundos finales y por eso el aplauso no cesó hasta terminada la proyección, cuyo broche fue el conocido logo municipal "¡Viva la ciudad!"

Comentarios