Por Irene Benito
12 Septiembre 2011
MONUMENTO HISTORICO. El Ground Zero volvió a la normalidad. REUTERS
NUEVA YORK, Estados Unidos.- El 12 de septiembre ya está aquí. El lunes trajo alivio tras las jornadas de tensión previas al décimo aniversario de los ataques del 11 de septiembre. Lentamente, Nueva York regresa a la normalidad porque, también lentamente, la Policía desarma el impresionante operativo de seguridad que montó para proteger el área de Ground Zero.
Desaparecen las restricciones a la circulación y concluye la impresionante agenda de actividades conmemorativas de los atentados. El 11-S inspiró cientos de recitales, muestras artísticas, charlas e instancias de reflexión colectivas en paralelo al acto central y oficial de la apertura del 9/11 Memorial, en Ground Zero. El espíritu evocativo de la masacre impregnó por igual a centros de compras y universidades; museos y templos religiosos; clubes deportivos y organizaciones civiles.
En la medida en que los efectos de la conmemoración del 11-S se desvanecen, vuelven a emerger las contingencias económicas y financieras que preocupan a Estados Unidos. El Gobierno de Barack Obama ha demostrado capacidad para custodiar la seguridad doméstica en la jornada más simbólica de la historia reciente del país. Pero no hay tiempo para saborear esta pequeña conquista acaecida en los albores de la campaña electoral. Los problemas relacionados con la creación de empleo y el endeudamiento ahogan cualquier tipo de festejo. LA GACETA ©
Desaparecen las restricciones a la circulación y concluye la impresionante agenda de actividades conmemorativas de los atentados. El 11-S inspiró cientos de recitales, muestras artísticas, charlas e instancias de reflexión colectivas en paralelo al acto central y oficial de la apertura del 9/11 Memorial, en Ground Zero. El espíritu evocativo de la masacre impregnó por igual a centros de compras y universidades; museos y templos religiosos; clubes deportivos y organizaciones civiles.
En la medida en que los efectos de la conmemoración del 11-S se desvanecen, vuelven a emerger las contingencias económicas y financieras que preocupan a Estados Unidos. El Gobierno de Barack Obama ha demostrado capacidad para custodiar la seguridad doméstica en la jornada más simbólica de la historia reciente del país. Pero no hay tiempo para saborear esta pequeña conquista acaecida en los albores de la campaña electoral. Los problemas relacionados con la creación de empleo y el endeudamiento ahogan cualquier tipo de festejo. LA GACETA ©
Lo más popular
