BUENOS AIRES.- Muy emocionada y feliz por dejar el encierro, la tucumana Solange se convirtió anoche en la última expulsada de la casa de Gran Hermano. Entre lágrimas y sonrisas, ya en el piso del estudio con Jorge Rial, la morocha afirmó que el paso por el reality la hizo crecer, adelantó que tiene planeado mudarse a Buenos Aires y confirmó que posará sin ropas para las revistas. "Haría un desnudo artístico. Hay que probar", dijo la joven, de 22 años.
La tucumana, que debió marcharse con el 51,35% de los votos negativos, afirmó que el juego cubrió sus expectativas. "Estoy feliz. Llegué bastante lejos para lo que esperaba", apuntó. "De Gran Hermano me llevo haber conocido gente nueva y también el crecimiento que tuve. Ya no soy tan dependiente de mi mamá", reflexionó.
Solange, que trabajaba como promotora y como chef antes de ingresar al reality, afirmó que quiere que Emiliano sea el ganador, aunque valoró también lo realizado por Cristian U, Martín Pepa y Martín Anchorena, los otros finalistas. La tucumana continuará por el momento en Buenos Aires, ya que de ahora en más formará parte del panel de ex participantes en el "El Debate", que se emite de lunes a viernes por la tarde. (Especial)