28 Marzo 2011 Seguir en 
PERTRECHADOS. Rebeldes se preparan para doblegar a Gaddafi. REUTERS
TRIPOLI, Libia.- La contraofensiva lanzada por las fuerzas rebeldes libias con el respaldo de los bombardeos de la coalición internacional no logró llegar a Sirte, el feudo natal de Muammar el Gaddafi, donde siguen resistiendo las unidades leales al régimen a la espera de la irrupción de los sublevados, informó el diario español "El País".
La estratégica ciudad, cuya conquista allanaría el camino hacia Trípoli, es uno de los objetivos prioritarios de los opositores desde que estallaron las revueltas a mediados de febrero. Pese a que un portavoz del Consejo Nacional libio anunció desde Bengasi que los rebeldes habían entrado en el enclave, un grupo de periodistas extranjeros pudo constatar que el control de la ciudad sigue en manos del Gobierno.
Más cerca de la capital, Trípoli, las fuerzas de Gaddafi lucharon con los rebeldes en el centro de Misrata, la tercera ciudad más grande del país, para tratar de consolidar su posición en el oeste de Libia. Allí murieron al menos ocho personas y 24 resultaron heridas, cuando las fuerzas del dictador lanzaron disparos de mortero.
Algunos lugareños dijeron que estaban teniendo que recurrir a pozos para conseguir agua y que había escasez de medicinas. En tanto, al menos seis explosiones resonaron en Trípoli, seguidas de largas ráfagas de fuego antiaéreo por parte de las fuerzas libias. La televisión dijo que se habían producido ataques aéreos en zonas civiles y militares de la capital. (Especial-Reuters)
La estratégica ciudad, cuya conquista allanaría el camino hacia Trípoli, es uno de los objetivos prioritarios de los opositores desde que estallaron las revueltas a mediados de febrero. Pese a que un portavoz del Consejo Nacional libio anunció desde Bengasi que los rebeldes habían entrado en el enclave, un grupo de periodistas extranjeros pudo constatar que el control de la ciudad sigue en manos del Gobierno.
Más cerca de la capital, Trípoli, las fuerzas de Gaddafi lucharon con los rebeldes en el centro de Misrata, la tercera ciudad más grande del país, para tratar de consolidar su posición en el oeste de Libia. Allí murieron al menos ocho personas y 24 resultaron heridas, cuando las fuerzas del dictador lanzaron disparos de mortero.
Algunos lugareños dijeron que estaban teniendo que recurrir a pozos para conseguir agua y que había escasez de medicinas. En tanto, al menos seis explosiones resonaron en Trípoli, seguidas de largas ráfagas de fuego antiaéreo por parte de las fuerzas libias. La televisión dijo que se habían producido ataques aéreos en zonas civiles y militares de la capital. (Especial-Reuters)
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