El informe médico será clave para el reinicio del juicio

José María David, del Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, llegará hoy a Tucumán y la intención es que se quede hasta mañana, día que se fijó como fecha para la continuación de la audiencia inaugural del juicio oral contra Antonio Bussi y Luciano Benjamín Menéndez. El inicio está previsto para las 9.30.
El lunes, el profesional examinó al ex gobernador (diagnosticó que estaba en condiciones de comparecer al día siguiente) y regresó a Buenos Aires el mismo día, por la noche. Pero Gabriel Casas, vocal del Tribunal Oral en lo Criminal Federal que conduce la audiencia de debate, solicitó ayer al Cuerpo Médico Forense que permita que David permanezca en la provincia ante la posibilidad de que Bussi pueda sufrir otra indisposición, como la del martes. Ese día debieron internarlo y pasar a un cuarto intermedio sin que pudiera terminar de leerse la acusación que pesa contra él y contra el otro imputado por la desaparición del ex senador peronista Guillermo Vargas Aignasse, en 1976.
El inconveniente que se presentaba hasta anoche para la permanencia de David era la falta de pasajes aéreos entre Tucumán y Buenos Aires. En teoría, luego de examinar a Bussi, el cardiólogo tiene que limitarse a manifestar si está en condiciones de presentarse -y desde cuándo- ante el tribunal. El profesional no cumplirá una función asistencial durante el desarrollo de las audiencias (lo harán los profesionales designados por el Sistema Provincial de Salud), sino que debe informar sobre lo que concretamente se le requirió. No obstante, teniendo en cuenta lo que sucedió el martes, los magistrados pidieron que se quede hasta mañana.
Si David pronosticara que, por sus afecciones cardíacas, el gobernador debe guardar reposo durante un determinado lapso, tendrá que establecer un plazo estimado. Pero si este se prolongara durante más de 10 días hábiles (término máximo previsto para una suspensión por el Código Procesal Penal de la Nación), entonces, los miembros del tribunal se verán obligados a tomar una decisión respecto a desde cuándo continuará el juicio y si es necesario seguir adelante momentáneamente sólo en relación con Menéndez, hasta que el ex mandatario provincial estuviera posibilitado físicamente de escuchar la acusación. Esto es imprescindible para que pueda ejercer su derecho de defensa. Precisamente, el legislador Ricardo Bussi insistió ayer en que su padre pretendía hablar el martes, algo que le iban a preguntar (si quería hacer uso de la palabra) después de que oyera el requerimiento fiscal y el auto de elevación a juicio de la causa.
Hasta que comenzó el juicio, siempre se le daba intervención a los peritos de parte, es decir, a los profesionales de la salud ofrecidos en este caso por la defensa de Bussi, para que efectuaran su propio informe. No obstante, para que proceda la suspensión de esta instancia por enfermedad del imputado, el artículo 365, inciso 5 del mencionado código prescribe que la enfermedad debe ser comprobada por “médicos forenses”. Esto significa que la palabra de David volverá a ser decisiva.