QUITO, Ecuador/BOGOTA, Colombia.- El presidente de Ecuador, Rafael Correa, afirmó hoy que el gobierno de Bogotá frustró la liberación de la ex candidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt con el operativo militar que protagonizó en Ecuador el sábado y que se cobró la vida de 21 guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
En un mensaje extraordinario dirigido a la Nación, Correa afirmó que las negociaciones estaban bastante avanzadas y que iban a lograr la liberación, en las primeras semanas de marzo, de 12 rehenes, entre ellos Betancourt.
"Pero ahora todo se ha frustrado", lamentó el mandatario. Las negociaciones estaban dirigidas por el ministro de seguridad de Ecuador, Gustavo Larrea, quien fue acusado por el jefe de la Policía colombiana de haber establecido relaciones con las FARC.
En el mensaje, Correa oficializó la ruptura de relaciones diplomáticas con Colombia anunciada horas antes. Lanzó un llamamiento de tranquilidad para los 300.000 colombianos que viven en Ecuador, a quienes les aseguró: "pueden estar aquí como en su casa".
Con duros epítetos se refirió al presidente de Colombia, Alvaro Uribe, a quien tildó de desleal, de protagonista de actitudes canallescas y de mentiroso, entre otros calificativos.
Se preguntó si la intención de la incursión colombiana tenía el objetivo de desestabilizar al gobierno y poner un títere en el poder, en referencia a la relación de Uribe con Estados Unidos.
Correa aseguró que Ecuador no está solo, exhortó a la unidad de los habitantes y afirmó que el intento de regionalizar el conflicto colombiano por parte de Uribe será detenido antes de que se convierta en un nefasto precedente.
Tráfico de secuestrados
La repuesta del gobierno de Colombia no se hizo esperar: afirmó que los contactos de funcionarios ecuatorianos con las FARC no tenían un fin humanitario sino un tráfico de secuestrados.
Larrea había dicho que, además de Betancourt, la nómina de rehenes por los que se negociaba incluía a los ciudadanos estadounidenses Thomas Howes, Keith Stansell y Marc Gonsalves, cuatro militares y tres policías colombianos y un ciudadano ecuatoriano.
Sin embargo, el gobierno colombiano desestimó esta información.El mandatario ecuatoriano iniciará entre hoy y mañana una gira por Perú, Brasil, Venezuela, Panamá y República Dominicana para explicar la delicada situación entre Bogotá y Quito.
El cadáver de Reyes
Por otra parte, una decena de personas y la organización religiosa "Jesusianos" se presentaron en las últimas horas para reclamar el cadáver del líder guerrillero Raúl Reyes, abatido por las fuerzas colombianas.
El cuerpo del segundo de las FARC se encuentra en la sede de Medicina Legal, en la capital colombiana, donde fue llevado el pasado sábado por miliares colombianos.
"Reyes es del movimiento `Jesusiano` y por eso lo reclamamos. Hable con él para la Navidad y nos dijo que la organización estaba funcionando bien, que tiene muchos adeptos y que iba a transformar al mundo", comentó Martha Lucia de Kaufmann, representante de la comunidad Jesusiana.
La mujer explicó que ese movimiento "es un grupo de personas que andan por todo el mundo viviendo la doctrina de Jesús".
El director de Medicina Legal, Pedro Franco, explicó que los parientes más cercanos tienen más derecho a reclamar el cuerpo que sus conocidos o amigos.
"Una avalancha de personas han llamado o venido y todos quieren tener el cuerpo", comentó. Entre quienes han expresado el interés de retirar el cadáver del rebelde se encuentra una supuesta esposa que dijo tener el certificado del matrimonio. (DPA-Télam)