Más que la jerarquía del cargo, es un gesto hacia el peronismo que no es refractario con el Poder Ejecutivo. El alperovichismo abrió uno de sus reductos -el Ministerio de Gobierno- a Marcelo Caponio, apoderado del PJ desde la era mirandista. Se refuerza, por una parte, la histórica vinculación Estado y partido. Y por la otra, se admite la existencia de un déficit de relación con las organizaciones partidarias de distinto signo. Fernando Juri bendijo la renovación del pacto.