Silvio Bellomio.
En el marco de las elecciones legislativas del 26 de octubre, LA GACETA continúa con “Detrás del candidato", un segmento que busca mostrar el costado más humano de quienes aspiran a representar a los tucumanos en el Congreso. A través de una serie de preguntas personales, los postulantes revelan sus pasiones, sus recuerdos, sus rutinas y los valores que los acompañan fuera de la política.
En esta ocasión, el protagonista es Silvio Bellomío, candidato a diputado nacional por Pueblo Unido, quien abre una ventana a su historia personal, sus raíces en Tucumán y su mirada sobre la vida, la familia y el futuro.
- Si pudiera volver a los 18 años, recién egresado del secundario y con la vida por delante, ¿qué consejo se daría?
- Vive más los buenos momentos, sin culpa de los logros, no te presiones, viaja más, con poco equipaje. Disfruta más de los seres queridos, más asados, reuniones, partidos. El futuro llega pronto.
- ¿Cómo definiría en pocas palabras a su ciudad natal? ¿Qué la hace especial o distinta?
- Es la Ciudad Histórica de todos los argentinos, en donde se declaró la Independencia de nuestra patria, y se libró la batalla que nos dió la razón de nuestro ser. Tucumán es Patria.
- En su familia, ¿Hubo alguien a quien le apasionaba la política y que haya influido en su vocación actual?
- Los tanos son pasionales. La política no se escapaba de la agenda. Nuestra historia de antagonismo permanente incide siempre en nuestra formación. Tuve tres tíos en especial -un economista ortodoxo, un ingeniero desarrollista y un abogado liberal- que no incursionaron en la marquesina política, pero tenían formación profesional que me incentivó a profundizar conceptos. No me gustaba quedarme con las discusiones tribuneras, de sobremesa, sin sustento. Nuestra composición social, con la mayoría perteneciente a una clase media aspiracional, hace imposible una charla familiar sin temas políticos.
- Antes de dedicarse a la política, ¿Usaba el transporte público? ¿Qué línea de colectivos tomaba con más frecuencia y hacia dónde?
- Por supuesto, mi medio de transporte desde la época escolar y universitaria. Las líneas 102, 118 y 6 fueron las que utilizaba con más frecuencia. El transporte público es una deuda de la Capital y de la provincia. No podemos seguir subsidiando la oferta.
- ¿Hay alguna calle, barrio o lugar de San Miguel de Tucumán que le genere recuerdos, reflexiones o agradecimientos?
- Sin dudas Villa 9 de julio, en donde pasé gran parte de mi infancia y en donde también vivían mis abuelos. La calle Lavalle en barrio Sur, la plaza Urquiza, la zona de mis colegios: Belgrano y Tulio. También el parque Guillermina, en donde fundamos un club de rugby y mi división jugó el primer partido en esa cancha.
- Cuando necesita desconectarse de la rutina, ¿qué elige hacer?
- Busco distraerme haciendo deportes -después del 26 vuelvo-, leyendo, escuchando música, veo eventos deportivos por TV, viajo. Me reúno con amigos y conocidos.
- ¿Tiene una banda o una canción que no deja de escuchar sin importar el paso del tiempo?
- La música de los 80’s y 90’s me remite a los mejores momentos de mi infancia y juventud. Grupos como los Guns, Aerosmith, The Police, Génesis, Charly, Soda, como no escucharlos siempre. Al convivir con hijos adolescentes, es inevitable incorporar a la grilla a Catriel o Paco Amoroso, entre otros. Más allá de su música, me transmiten rebeldía, pelearle al sistema y al status quo.
- En su entorno familiar o cercano, ¿los jóvenes suelen hacerle planteos sobre su gestión o sobre temas que les preocupan?
- Los jóvenes están más informados de lo que nuestra generación cree. La principal masa crítica la tengo en casa, con mis hijos adolescentes. Ellos van al por qué, cómo se soluciona y entienden el concepto de ser independiente con sustento ideológico (liberal, realista, republicano, federal). En mis clases, en el posgrado de tributación, se genera un feedback con los alumnos (que es enriquecedor y coincidimos en la necesidad de modificar el sistema tributario obsoleto vigente.
- Si pudiera tomar un café con alguien que no pertenezca a su espacio político, ¿con quién sería? ¿De qué tema le gustaría conversar o intercambiar miradas?
- Habitualmente tomo café con quienes no están en mi espacio político. Busco masa crítica. No me rodeo de quienes me dan la razón. Me enriquecen las charlas con referentes políticos de otras provincias, su visión sin sesgos de nuestra provincia. Tuve el privilegio de reunirme siempre con quien me interesaba hacerlo en Argentina.
- ¿Cómo se imagina dentro de 10 años? ¿Qué proyectos personales o públicos le gustaría haber concretado para entonces?
- Benedetti escribió “No es que nos ponemos viejos, el espejo no tiene memoria”, me veo en 10 años persiguiendo los objetivos de toda la vida, disfrutando de los afectos y sobre todo nunca resignado a no concretar el destino de potencia que tenemos como país. Me veo en mi provincia, en el lugar donde me desarrollé, y sin mirarme muy seguido al espejo.






