Está previsto que Uruguay vote hoy la despenalización de la eutanasia, lo que lo convertiría en el primer país de América Latina en legalizar el procedimiento. La Cámara de Diputados ya aprobó el proyecto de ley en agosto, con el apoyo de legisladores de varios partidos políticos. Ahora será considerado por el Senado, donde la coalición de izquierda Frente Amplio, que apoya la iniciativa, tiene mayoría.
Al igual que en la Cámara de Diputados, se espera que la votación en el Senado se divida en el bloque opositor. Los partidos tradicionales Nacional y Colorado tienen posturas divergentes sobre la cuestión. Sin embargo, algunos miembros de estos partidos, como Graciela Bianchi (Nacional) y Andrés Ojeda (Colorado), indicaron que votarán a favor del proyecto de ley, según el periódico El País.
Mientras tanto, Robert Silva (Colorado) tiene previsto solicitar una licencia, al permitir que su suplente, Ope Pasquet, tome su lugar. Pasquet fue un defensor clave del proyecto de ley en la legislatura anterior, donde fue aprobado por la Cámara de Diputados pero no llegó a ser considerado por el Senado. "Después de tanto luchar, será parte de esto", dijo Silva.
Una presencia especial en el recinto
Entre los presentes en las galerías del Palacio Legislativo estará Beatriz Gelós, una paciente con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) que apoya el proyecto de ley.
Debido a su ELA, Gelós es incapaz de realizar actividades cotidianas como bañarse sola, escribir a mano o siquiera tomar agua cuando tiene sed. Esta profesora de 71 años desea recuperar la capacidad de realizar estas actividades simples y poder cuidar de sus nietos.
Se espera que también asistan grupos como Empatía Uruguay y Tenemos ELA, que defendieron el proyecto de ley. Prudencia Uruguay, un grupo que se opone al proyecto de ley, también tiene previsto asistir.
Durante el debate en la Cámara de Diputados, los defensores del proyecto de ley argumentaron que la propuesta "regula y garantiza el derecho de las personas a pasar dignamente por el proceso de morir y a recibir asistencia para hacerlo". También creen que cada persona tiene el "derecho" de decidir qué hacer con su propio destino y "evitar el sufrimiento que considera insoportable según su percepción personal".






