Banco Central.
“Un progreso duradero requerirá que Argentina adopte un régimen cambiario más flexible, acumule reservas y genere apoyo para sus reformas internamente”. La advertencia de Gita Gopinath, ex número dos del Fondo Monetario Internacional (FMI), llegó justo cuando EEUU anunció su respaldo. El mensaje es claro: para enfrentar los compromisos que asoman, y continuar flexibilizando los controles, hay que recomponer reservas, recuerda GMA Capital en su último informe.
Con respecto a los vencimientos en moneda dura, son algo apretados en lo que queda de 2025, con obligaciones por U$S 3.900 millones. Los giros del FMI por U$S 2.000 millones llegarían recién en enero, y, aunque el BID y el Banco Mundial anunciaron adelantos a sus programas, no se cuenta con cronograma certero.
Entre tanto, las reservas netas se encuentran en U$S 7.128 millones. Entonces, ¿de dónde saldrán los dólares? GMA prevé que el Tesoro deberá recuperar su racha compradora en el mercado, apoyándose en la liquidación extraordinaria que logró la eliminación temporaria de retenciones.
Lo positivo es que la “tarea” ya parece haber empezado el martes pasado, con liquidaciones del agro por U$S 236 millones. Se estima que el jueves y el viernes pasado la autoridad volvió al lado comprador y se llevó U$S 281 millones y U$S 1.350 millones, ayudado por una liquidación récord de U$S 1.050 millones y de más de U$S 1.500 millones, respectivamente. Así, el total de los U$S 1.100 millones vendidos en jornadas previas por el Banco Central (BCRA), ya habría sido recobrado.
Ahora, ¿qué sigue estos días? Según el economista Nery Persichini, queda tan solo una rueda clave, en las que el mercado proyecta liquidaciones cercanas a U$S 2.000 millones.
“Si el flujo se confirma y el Tesoro sostiene la postura compradora, podría recomponer parte del colchón perdido y encarar mejor los pagos de fin de año”, explica el consultor. Si bien no se descarta mayor apoyo norteamericano, como podría ser la confirmación de adquisiciones de bonos argentinos, la compra de dólares por parte del Tesoro es la señal positiva más sostenible.
Las elecciones
Mas allá de lo inmediato, ¿cómo puede seguir la película luego de las elecciones? El programa con el FMI exige acumular reservas por más de U$S 11.300 millones para junio de 2026, lo que implicaría más de U$S 1.000 millones de compras mensual.
En la historia reciente, en un escenario sin cepo y sin acceso a los mercados financieros, esto se logró con un dólar por encima de $ 1.600, recuerda GMA. ¿Cómo cambia la historia con cepo? La restricción a la demanda permitió realizar compras de esta magnitud con el billete apenas arriba de $ 1.300, aunque por supuesto con otros costos.
Por lo pronto, con la configuración de un dólar más cercano al techo de la banda o incluso superior luego de las elecciones, lo positivo es que las cuentas externas se encuentran más cerca del equilibrio. Históricamente, el déficit de cuenta corriente ha sido menor al 1% del PBI con un dólar a precios actuales cercano a los $ 1.500. Si bien este resultado exige financiamiento externo, el nivel luce mucho más sostenible, finaliza GMA.









