
¿Qué tienen en común el Vaticano y Tucumán? Difícil encontrar similitudes. Sin embargo, en las últimas horas, ambos lugares tuvieron a los Cardenales como protagonistas. En la sede central de la Iglesia Católica, el motivo fue muy poco agradable: el fallecimiento del papa Francisco, lo que llevará a la realización de un cónclave para elegir al nuevo Sumo Pontífice. En el norte de Argentina, fue el equipo de Silvano Bores al 400 el que dio un nuevo golpe sobre la mesa, esta vez en el Torneo del Interior B. Los “Purpurados”, que dos semanas atrás habían roto un largo invicto ante equipos tucumanos de Lawn Tennis, vencieron 32-27 a Tucumán Rugby en la segunda fecha de la fase de grupos, alimentando la ilusión de pelear la clasificación.
La derrota en la primera fecha, por la mínima, ante Mar del Plata RC obligaba a los dirigidos por Adrián Ghazarián a ganar para seguir con chances. Los “Verdinegros”, por su parte, llegaban de vencer a Liceo de Mendoza, y con un triunfo, ya casi se aseguraban el pase a cuartos de final.
El comienzo fue inmejorable para Cardenales. A los tres minutos, tras un penal forzado por el scrum -una de sus armas más importantes-, Ignacio Cerrutti acertó una patada casi desde mitad de cancha para abrir el marcador. Un par de minutos después, el propio Cerrutti pateó un kick que Francisco Abi Cheble, aprovechando un mal cálculo de Evaristo Paz, capturó para escaparse sin marca al ingoal rival y apoyar el primer try del partido bajo los palos. Rápidamente, el local se ponía 10-0 arriba (con conversión de Cerrutti mediante), y condicionaba el trámite del encuentro. Un nuevo penal del apertura, desde mitad de cancha, estiró la ventaja.
Tucumán Rugby tuvo sus chances en ese primer tramo. Con la explosión y la velocidad de sus backs, generó espacios en la defensa de Cardenales en varias oportunidades, pero algunas imprecisiones le impidieron concretar. Recién cerca de los 20‘ logró salir del cero: igual que en el try de Cardenales, fue clave un kick de su apertura, Jorge Domínguez, que encontró en soledad a Nicolás Calleri por la punta izquierda del ataque. Con la conversión de Rodrigo Galíndez desviada, el marcador se ponía 13-5.
Durante el resto del primer tiempo, Tucumán Rugby manejó los hilos del partido, con mucho trabajo de su pareja de medios, Domínguez y el medio scrum Santiago Paz Posse. Gerardo Cabrera, medio scrum de Cardenales, vio la amarilla a falta de 15 minutos para el descanso, y los “Verdinegros” lo aprovecharon. Después de un penal fallado por Cerrutti (el único de la tarde), Calleri volvió a apoyar por la esquina izquierda, tras un maul que no terminó de prosperar y cayó al piso. Esta vez, Galíndez, desde una posición idéntica a la anterior, acertó la conversión, dejando a su equipo apenas un punto abajo. El 13-12 se mantuvo hasta el cierre de la primera mitad.
Igual que en el comienzo del partido, Cardenales golpeó de arranque en la segunda mitad. Apenas iban dos minutos del complemento cuando, tras una gran corrida de Abi Cheble, Jeremías Muñoz capturó una pelota que quedó suelta y llegó sin oposición al ingoal rival para apoyar bajo los palos y darle a su equipo algo de aire.
En cuanto a los puntos, Cardenales no volvió a estar apretado. Durante un segundo tiempo donde primaron las imprecisiones y las infracciones, ambos equipos sumaron a través de penales. Sobre todo el equipo de Ghazarián, que sumó 12 puntos por esa vía: seis por intermedio de “Nacho” Cerrutti, y seis a través de su hermano Cipriano. Antes, Galíndez había descontado para Tucumán Rugby.
Ninguno de los dos equipos supo explotar del todo los momentos de superioridad numérica. En Tucumán Rugby, vieron la amarilla Nicolás Ocaranza y Facundo Padilla; en Cardenales, lo hizo Isaac Bravo.
Con el reloj en contra, Tucumán Rugby intentó una remontada que no alcanzó. Joaquín Aguilar, tras una buena secuencia de pases y con el pick & go, apoyó en el ingoal por el sector izquierdo. Y sobre la chicharra, el árbitro le concedió un try penal a los dirigidos por Hernán Macome por un tackle alto a Mateo Pasquini cuando ya estaba prácticamente en el ingoal, bajo los palos. Esta jugada sentenció el final del encuentro, con triunfo para Cardenales, y un pequeño consuelo para Tucumán Rugby por el punto bonus defensivo.
“Sentimos una felicidad enorme, esto es mérito de todo el grupo. En la cancha se vio reflejado lo que trabajamos durante la semana. Fue un partido muy duro, muy trabado; la clave fue estar concentrados los 90 minutos”, remarcó Juan Ignacio Díaz, tercera línea y capitán de Cardenales.
“Nacho” también destacó el buen comienzo del equipo en el partido, algo clave. “Comenzamos mejor, supimos manejar esos minutos, y en el segundo tiempo supimos aguantar cuando se vinieron”, subrayó.
“Hoy la clave pasó por los forwards. Estuvimos muy firmes en el scrum, y en la parte de line intentamos mejorar. Todo el equipo estuvo muy unido”, destacó, por su parte, Santiago Gayá, que también hizo hincapié en la defensa. “Venimos entrenando mucho para tener una buena barrera en defensa. Eso nos dio de comer en este partido, para jugar con este equipo, que es muy rápido con los tres cuartos. Había que afinar mucho eso para este partido”, detalló.
Pese a la felicidad por el buen momento del equipo, Díaz advirtió que no se conforman. “Estamos en una muy buena racha, pero hay que seguir. Esto no significa nada. Somos un equipo humilde, vamos paso a paso”, concluyó el capitán.
Ambos equipos se jugarán la clasificación en la última fecha, mano a mano ante sus rivales. Los cuatro equipos ganaron un partido y perdieron otro. Tucumán Rugby recibirá a Mar del Plata RC, mientras que Cardenales viajará a Mendoza para visitar a Liceo. Ambos cotejos se jugarán el sábado 17 de mayo.