Josef Fritzl, el “monstruo de Amstetten”, podría quedar libre

Josef Fritzl, el “monstruo de Amstetten”, podría quedar libre

Había mantenido cautiva y violado a su hija durante 24 años.

archivo archivo
18 Enero 2024

La Justicia de Austria analiza la excarcelación de Josef Fritzl (foto), conocido como el “monstruo de Amstetten”, que había sido condenado a cadena perpetua por encerrar y por violar a su hija durante 24 años. El tribunal tomaría la decisión en las próximas semanas.

Un vocero de una Corte regional de Krems, al oeste Viena, confirmó que tres magistrados examinarán las opiniones de expertos con vistas a modificar la actual situación de Fritzl. Se manejan dos alternativas: o podría ser internado en el sistema penitenciario normal -actualmente se encuentra en un centro especializado-, o, lo más probable, quedar en libertad provisional. “Los expertos sostienen que ya no es peligroso solo por razones de salud”, dijo el vocero Ferdinand Schuster.

Fritzl tiene 88 años, y lleva cumplidos 15 años de condena, lo que facilita una revisión de su caso. En 1984, encerró a su hija de 18 años en un escondite insonorizado en los subsuelos de la vivienda familiar. Durante más de dos décadas, la violó de manera incesante, fruto de lo cual la joven dio a luz a siete niños -uno de ellos falleció-. El resto de la familia no tenía constancia de los abusos.

Los cálculos de los investigadores indicaron que Fritzl violó unas 3.000 veces a su hija durante el cautiverio a la que la sometió. En abril de 2008, uno de los hijos de ella se enfermó y debió ser hospitalizado. Los responsables del centro médico querían conocer a la madre, de quien no había noticia. Finalmente, Fritzl le permitió que fuera a visitarlo, pero esto llamó la atención de la Policía, que comenzó a investigar más en profundidad.

Según los periodistas del diario alemán Bild, a quienes Fritzl dio una entrevista en 2017, no siente remordimientos por lo que hizo, ni reflexionó sobre la atrocidad de sus actos.

Fritzl solo habla abiertamente de su mujer, Rosemary, a la que todavía ama: “Le he escrito ocho cartas, pero nunca me contestó. Sueño con que algún día salga vivo de aquí. Quiero volver a cuidar a mi mujer, porque ella siempre me ha sido fiel”. Su mujer, Rosemary, se divorció de él a poco de su encarcelamiento, y comenzó una nueva vida junto a sus hijos, en un lugar secreto.

Temas Austria
Tamaño texto
Comentarios
Comentarios