Las valijas comenzaron a "volar" en 2002

Las valijas comenzaron a "volar" en 2002

Instrucciones por e-mail. El joven de 24 años declaró que era una práctica habitual el envío de maletines. La empresa TAS, que realiza el control de los equipajes, sería cómplice del narcotráfico.

TRAMITES. El juez Liporace continuará esta semana con la investigación del contrabando de cocaína. TRAMITES. El juez Liporace continuará esta semana con la investigación del contrabando de cocaína.
21 Febrero 2005
BUENOS AIRES.- Walter Beltrame, de 26 años, responsable de la atención de los pasajeros frecuentes de la aerolínea Southern Winds (SW) e hijo de quien hasta hace cinco días era el jefe militar del aeropuerto de Ezeiza, se presentó el jueves ante la Justicia porteña y quedó detenido. Al día siguiente, declaró durante siete horas ante el juez Carlos Liporace y la fiscal María Gabriela Ruiz Morales. Para evitar que trascendieran los contenidos de la declaración, el funcionario judicial dispuso el secreto de sumario en el caso conocido como de "las valijas voladoras".
Sucede que Beltrame, señalado por muchos como un hombre clave de la intrincada madeja que salió a la luz con el descubrimiento de contrabando de cocaína por el principal aeropuerto de la Argentina, dijo muchas cosas y presentó numerosos documentos internos, buscando descargar su responsabilidad en el caso.
Todo comenzó el 17 de setiembre del año pasado, cuando en el aeropuerto de Barajas (Madrid) se encontraron cuatro valijas -sin dueño- que contenían 60 kilos de cocaína, con un valor de entre U$S 2 millones y U$S 3 millones.

Lo que dijo
Según un informe que publicó ayer el matutino porteño "Clarín", las valijas comenzaron a "volar" en el año 2002. Beltrame habría aportado los siguientes datos o pruebas:
A) Aseguró que SW dejaba pasar valijas sin pasajeros desde 2002. A través de su abogada, el hasta ahora principal acusado entregó más de 10 fotocopias de planillas, en las cuales constarían los vuelos internos en los que se habrían despachado valijas "sin dueño". Esto constituye una clara violación del reglamento interno de la aerolínea.
B) Según habría declarado Beltramo, SW no habría actuado sola. Todo lo contrario. Los envíos se habrían hecho con la colaboración y complicidad -según "Clarín"- de la firma TAS, empresa a la que la aerolínea contrató para que se ocupara de los controles de equipaje y pasajeros. Justamente, el joven detenido habría dicho que -por eso- los controles eran muy leves.
A pesar de que la Policía Aeronáutica Nacional es responsable de controlar lo que sale o ingresa por el aeropuerto de Ezeiza, las compañías aéreas están obligadas a contratar servicios privados que se ocupen de escanear el equipaje.
C) Beltrame, en su declaración ante la Justicia -según los trascendidos-, sostuvo que eran los gerentes de SW los únicos autorizados en dar "luz verde" a las valijas "voladoras". Y que las instrucciones eran transmitidas a sus gerentes y empleados por correo electrónico.
Pero Beltrame no es el único funcionario o empleado de la aerolínea detenido en la causa. Los otros son el gerente de ventas de la empresa, Fernando Arriete, y el jefe de la base de SW en Ezeiza, Claudio Baudino.
Aparentemente, el juez Liporace sospecha que Arriete autorizó los embarques de las valijas, con el apoyo de Baudino, y que también era el encargado de comprobar el éxito de la operación desde Madrid, donde se encontraba el 17 de setiembre.
Pero tanto Arriete como Baudino responsabilizaron de los hechos investigados a los directivos de la aerolínea, Juan Maggio y Cristian Maggio, diciendo que estos dos últimos conocían todos los pasos que daban sus empleados, incluidos los gerentes.
Pero parece que esto no es todo. Los voceros judiciales estiman que podrían surgir muchas derivaciones del caso. (Especial)

Liporace dijo que desconoce si hay maniobras para sacarlo del caso
BUENOS AIRES.- El juez en lo Penal Económico Carlos Liporace dijo ayer que desconoce si hay maniobras para alejarlo de la causa en la que investiga el tráfico de 60 kilogramos de cocaína enviados a España en un vuelo de la línea aérea Southern Winds (SW), en setiembre último.
Liporace negó haber recibido presiones de funcionarios del Gobierno nacional o de organismos estatales. Y aseguró que desde su punto de vista no es importante saber si alguna autoridad del Gobierno sabía o no del episodio de contrabando de estupefacientes.
En una entrevista que dio a radio América, el juez fue consultado acerca de si tenía conocimiento de versiones que señalan que la causa podría volver al fuero federal, donde se inició en octubre último. "Lo desconozco, no he recibido ningún planteo de ninguna de las partes. Ni de los letrados defensores, ni de la señora fiscal Gabriela Ruiz Morales, ni de algún otro juez que me plantee algún tipo de inhibitoria o de cuestionamiento a la competencia de este fuero", señaló.
Un testigo con identidad reservada denunció el tráfico de estupefacientes en los primeros días de octubre ante el fuero federal, lo que originó "una pequeña demora lógica para determinar la competencia", que recayó por sorteo en el juzgado de Liporace, según contó el magistrado.
En relación con sus supuestas vinculaciones políticas, el juez negó estar relacionado con sectores del menemismo. Y aseguró que nunca tuvo nada que ver con el fallecido empresario telepostal Alfredo Yabrán. "La verdad es que al señor Yabrán nunca lo conocí. No tuve ningún diálogo con él, absolutamente nada que ver. Ningún contacto, ni físico ni de ningún tipo", dijo.

Trayectoria
Liporace -que fue señalado por Domingo Cavallo como uno de las jueces de la famosa "servilleta" del ex ministro menemista Carlos Corach- dijo que es independiente y que hizo su carrera judicial pasando por todos los puestos administrativos y que no sabe por qué se lo vincula a Carlos Menem. "Hace 10 años que soy juez y hace 35 años que soy funcionario judicial. No sé por qué me vinculan al menemismo. El solo hecho de haber sido designado juez durante un gobierno, no le da color partidario a la designación", afirmó.
"Los únicos llamados que he recibido son los del señor administrador de la Aduana, desde fines del año pasado, justamente cuando yo necesitaba la colaboración de la Policía Aduanera", señaló.
El juez aseguró que solicitó esa ayuda para realizar tareas de inteligencia con el objetivo de detener a alguna persona que pudiera estar circulando en el aeropuerto internacional de Ezeiza, desde donde partió el cargamento de cocaína. (DyN)

La PAN debe ser desmilitarizada
Buenos Aires.- El interventor civil de la Policía Aeronáutica Nacional (PAN), Jaime Garreta, reafirmó que la fuerza a su cargo tiene que ser desmilitarizada y debe quedar bajo la órbita del Ministerio de Interior, a la luz de las fallas en el control.
"Estoy convencido, doctrinariamente, que la PAN tiene que cambiar de jurisdicción y pasar al Ministerio del Interior", afirmó el funcionario en alusión a que la situación es analizada en los despachos de la Casa de Gobierno.
Según Garreta, que deberá elevar una alternativa de funcionamiento al presidente Néstor Kirchner en los próximos 45 días, es un anacronismo que la PAN siga siendo parte de una fuerza armada. "No concibo que haya una fuerza armada que se dedique a las dos cosas: a defender el aire y a defender la seguridad de los pasajeros", insistió en declaraciones publicadas ayer por el diario "La Nación".
En cuanto a la readecuación operativa en los controles de pasajeros y equipajes en los aeropuertos argentinos, Garreta dijo que es muy importante que el sistema sea redundante porque haría más difícil su vulneración.
Respecto de la dispersión de roles y responsabilidades en el aeropuerto internacional de Ezeiza, el interventor civil de la PAN dijo que "hasta ahora cada quien manda en lo suyo". Pero reconoció que hay que hacer un esfuerzo para mejorarlo. (Télam)

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