Atlético negocia para retener a sus ídolos

A poco más de tres meses para el campanazo final del 30 de junio, en Atlético comienzan a moverse en las ligas mayores de su propio plantel. Hay jugadores con los que la institución tiene un trato especial. Son dos los que están por encima del resto y da la casualidad que el vínculo finaliza justo cuando el año se despide de su primer semestre. Luis Rodríguez y Cristian Lucchetti quedarán en libertad de acción el próximo 1 de julio, aunque resulta casi imposible pensar que eso suceda como que ambos decidan decir adiós y buscar nuevos desafíos.

“Pulguita” y “Laucha” son parte del pasado de gloria y del feliz presente. También forman parte de la base de jugadores que construirán el futuro deportivo del “Decano”. “Estoy hablando y están bien encaminadas las negociaciones. Sí, me voy a quedar en Atlético”, anticipa el goleador de Simoca cuyo pensamiento no se desvía hacia su situación personal sino se dirige a la actualidad del equipo en la Superliga, en la Copa Libertadores y, cuando llegue el momento, también a la Copa Argentina. Rodríguez está tranquilo.

Con Lucchetti la directiva todavía no ha entablado conversación alguna. No hay nada raro. “Queremos que se termine de recuperar y vuelva cuanto antes. El día que nos sentemos a charlar cerramos todo en minutos. Él es patrimonio del club”, sostuvo un dirigente con la fe de quien no necesita de un milagro para convencer de dar un nuevo sí al mejor arquero de Atlético de los últimos 20 años.

Lucchetti prefiere no hablar de su situación contractual, lo que le preocupa hoy en día es recibir el alta médica y ponerse a disposición de Ricardo Zielinski. Quiere jugar. Lo necesita. De hecho, desde la CD sostienen que si hiciera falta, le firman un cheque en blanco.

Habiendo dado por sentado que “Laucha” y “Pulguita” seguirán, el resto de las tratativas irán hacia abajo. En los próximos días, se le hará una oferta formal de renovación a Guillermo Acosta. Esperan que sea positiva. No hay nada seguro. Dependerá de él.

Y mirando un poco más allá de lo inmediato, de los futbolistas que llegaron el año pasado, Rafael García es número puesto a convertirse en jugador del club, al igual que Jonathan Cabral, por ejemplo. “Estamos muy conformes con ellos”, dijeron. A diferencia de 2017, en este caso, Atlético pretende terminar de consolidar una base fija de 15 jugadores, agradecerle por sus servicios a otros y contratar figuras con el potencial de dar un golpe de efecto, algo que “Pulguita” y “Laucha” no se cansan de hacer. Y seguirán haciendo, si renuevan.

Si fuera por la cosecha reciente, la pausa sin fútbol de Superliga de este fin de semana le viene como anillo al dedo a Atlético y a sus comensales. ¿Cuál es el objetivo principal del grupo? Mantener la buena tarea realizada ante Boca, al tiempo que se insistirá en pulir viejos detalles que han costado caro a lo largo de este semestre.

Entre los puntos flacos está la pelota parada en defensa. Ante Boca, el “Decano” sufrió demasiado. No recibió goles por esa vía porque el “Xeneize” no estuvo fino ni estando debajo del arco.

Caso contrario es la pelota parada en ataque. De un tiro libre bien ejecutado por Guillermo Acosta, y consolidado por un gran cabezazo de Javier Toledo, llegó el 1-0 parcial ante los de La Ribera.

Otro punto positivo del parate es que el equipo podrá recuperar a jugadores que no están en su plenitud física: Toledo, Cristian Villagra y Luis Rodríguez, entre otros. Luego de la pausa, Atlético volverá a pisar el acelerador, ya que el sábado 31 visita a Independiente; el miércoles 4 de marzo juga con Peñarol, por la Copa, y el domingo 8 recibe a Newell’s, otra vez por el torneo local, en 25 de Mayo y Chile.