Mayo fue un mes ultraviolento en Tucumán

Mayo fue un mes ultraviolento en Tucumán

Hubo siete homicidios en 29 días, entre apuñalados y baleados. Todavía buscan a Daiana Garnica.

Mayo fue un mes ultraviolento en Tucumán
28 Mayo 2017
El mes aún no termina, y en Tucumán la lista sangrienta ya incluye siete vidas. Esa fue la cantidad de asesinatos que hubo desde principios de mayo hasta ahora, en nuestra provincia.

Eso, sin contar con que aún se busca desesperadamente a Daiana Garnica, desaparecida el 6 de mayo, y que la hipótesis más fuerte es que haya sido víctima de un crimen, por el cual están presos Diego Suárez (su vecino) y otras 12 personas.

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Un día después de que desapareció Daiana, un joven fue asesinado en Alderetes. La víctima, Diego Coria, iba por la calle con dos amigos, cuando fue interceptado en la calle por otros dos hombres, que los atacaron a balazos. Diego corrió pero recibió un balazo y murió como consecuencia de esa herida.

El 9 de mayo, en el hospital de Famaillá, murió Exequiel Escobar, que llegó con una herida punzante. Sus familiares apedrearon el hospital y los médicos pidieron seguridad al Gobierno.

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El 18 de mayo apareció el cuerpo de un joven con un balazo en la cabeza en el parque 9 de Julio. El cadáver fue hallado en las calles internas del paseo arbolado. La víctima, Alejandro Almada, de 25 años, habría mantenido un tiroteo en circunstancias no establecidas.

El asesinato de Matías Albornoz Piccinetti ocurrió el 19 de mayo, a las 13, en 25 de Mayo y Santiago. Los sospechosos son tres adolescentes. Según las cámaras instaladas en el lugar, un adolescente de 16 años (único imputado por el caso), el principal acusado de 15, y otro menor de 14 habrían atacado a un joven que se encontraba en la puerta de un local de comidas rápidas. Un grupo de alumnos del Gymnasium fueron a ayudar a su compañero y comenzaron a golpear a quienes lo habían atacado. Allí comenzó una persecución, que continuó por calle Santiago, donde Matías recibió la puñalada que le quitó la vida.

La batalla campal que se inició el 20 de mayo en el barrio Juan XXIII comenzó con la muerte de un hombre que miraba un partido de fútbol. El sábado a la tarde, Javier “El Cabezón” Zelarayán llegó, sin vida, al hospital Avellaneda. Había muerto por los tiros que recibió en la espalda mientras miraba un partido en La Bombilla. La división Homicidios comenzó a investigar el homicidio y sospechó que el crimen habría sido cometido por un tal “Meco” y un tal “Crillín”, ambos de la zona.

El mismo día, después de las 20, llegó al hospital Avellaneda una joven de 22 años que habría sido atacada a balazos en represalia por el asesinato. Para frenar esta escalada de violencia, la Policía salió a buscar a los sospechosos. “Meco” apareció por su cuenta. Antes de la medianoche, llegó pidiendo asistencia a la misma guardia que los anteriores, con un tiro en el abdomen. “Crillín”, que había logrado escapar, fue atrapado mientras dormía en la casa de su abuela.

El 22 de mayo, José Fernández murió asesinado luego de una pelea. La víctima tenía 28 años y fue atacada a tiros, en las inmediaciones del Canal Sur. Según testigos, el agresor fue un tal "Piel de Judas", que residiría en los márgenes del canal Sur.

Esta tarde, un policía federal mató a un hombre que intentó robar su almacén. El hecho ocurrió en Raúl Colombres al 1.500, en el barrio Viluco, al noreste de la capital. Otro asaltante fue internado con una herida en su abdomen.


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