El derrame desdibuja la imagen de Obama

WASHINGTON.- Luego de un traspié temporario, BP reanudó ayer la recolección de petróleo proveniente de un pozo averiado en el Golfo de México, centro de atención del país debido a la catástrofe ambiental que, además de sus efectos devastadores, está desdibujando la imagen del presidente Barack Obama. La fuga lleva 66 días y nada hace suponer que habrá novedades en las próximas semanas o meses.

El peor derrame en la historia del país ocupa el primer lugar en la agenda nacional de Obama, pero la mitad de los consultados en una encuesta de Wall Street Journal/NBC News dijo que desaprueba su gestión ante el derrame. Obama registró una aprobación de un 45% en el sondeo, 5 puntos menos que en mayo. Por primera vez en la encuesta, es mayor el número de gente que reprueba la gestión del mandatario, que ayer instruyó para que los pescadores de la zona costera, que desde hace semanas tienen prohibido desarrollar su trabajo en esas aguas, puedan regresar a algunas áreas.

Round perdido
Entre tanto, el Gobierno federal perdió ayer otra disputa legal al rechazar un juez la petición de dejar en suspenso la revocación de la veda a la perforación petrolera en aguas profundas, que ordenó Obama tras el derrame de BP. El juez Martin Feldman había dejado sin efecto una veda de seis meses a la exploración petrolera, y ayer rechazó la solicitud de congelar su fallo mientras se define la apelación. Feldman calificó la veda de arbitraria e injustificada dado su impacto sobre miles de trabajadores de la industria petrolera y en las comunidades. (Reuters)