27 Octubre 2009
La diputada nacional Beatriz Rojkés de Alperovich enfrenta dos denuncias en las cuales se asevera que incurrió en discriminación durante el acto oficial por el Día de la Lealtad que, en su carácter de titular del PJ tucumano, presidió el pasado 17 de octubre.
En esa oportunidad, la senadora electa aseveró, respecto del conflicto entre el Gobierno y los trabajadores autoconvocados de la sanidad, que quienes llevaban adelante el paro eran médicos jóvenes designados durante esta gestión. "Creo que el error ha sido no trabajar solamente con la gente de nuestro partido, que sabe lo que es la lealtad", aseguró entonces.
Frente a esta circunstancia, el titular de Cruzada Peronista, Enrique Romero, denunció ante la Justicia Federal a la primera dama provincial por la presunta comisión de los delitos de discriminación y de violación de garantías consagradas en el Pacto de San José de Costa Rica y en la Declaración Universal de los Derechos del Hombre.
"Los ciudadanos deben ser respetados por igual sin distinción de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política, origen nacional o social, posición económica o cualquier condición. (...) Pero las manifestaciones discriminatorias (de Rojkés) pretenden que la provisión de empleos públicos se circunscriba a las personas que ella considere, subjetivamente, leales a su esposo", cuestionó Romero.
Por otro lado, el abogado peronista Oscar López denunció a Rojkés ante el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi) por la presunta consumación de los delitos de apología de la discriminación y de violación de las declaraciones, derechos y garantías de la Constitución Nacional, así como también de los derechos consagrados en los tratados internacionales incorporados a la Carta Magna.
Según López, la parlamentaria habría atentado contra el principio de igualdad establecido por el artículo 16 de la Ley Fundamental. "El requisito para ser admitido en un cargo público ya no es la idoneidad sino la pertenencia al partido alperovichista", fustigó.
En esa oportunidad, la senadora electa aseveró, respecto del conflicto entre el Gobierno y los trabajadores autoconvocados de la sanidad, que quienes llevaban adelante el paro eran médicos jóvenes designados durante esta gestión. "Creo que el error ha sido no trabajar solamente con la gente de nuestro partido, que sabe lo que es la lealtad", aseguró entonces.
Frente a esta circunstancia, el titular de Cruzada Peronista, Enrique Romero, denunció ante la Justicia Federal a la primera dama provincial por la presunta comisión de los delitos de discriminación y de violación de garantías consagradas en el Pacto de San José de Costa Rica y en la Declaración Universal de los Derechos del Hombre.
"Los ciudadanos deben ser respetados por igual sin distinción de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política, origen nacional o social, posición económica o cualquier condición. (...) Pero las manifestaciones discriminatorias (de Rojkés) pretenden que la provisión de empleos públicos se circunscriba a las personas que ella considere, subjetivamente, leales a su esposo", cuestionó Romero.
Por otro lado, el abogado peronista Oscar López denunció a Rojkés ante el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi) por la presunta consumación de los delitos de apología de la discriminación y de violación de las declaraciones, derechos y garantías de la Constitución Nacional, así como también de los derechos consagrados en los tratados internacionales incorporados a la Carta Magna.
Según López, la parlamentaria habría atentado contra el principio de igualdad establecido por el artículo 16 de la Ley Fundamental. "El requisito para ser admitido en un cargo público ya no es la idoneidad sino la pertenencia al partido alperovichista", fustigó.
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