05 Agosto 2008
ACCESO PARA TODOS. La cantante británica exigió que los habitantes de los países pobres pueden pagar tratamientos. REUTERS
CIUDAD DE MEXICO, México/ MADRID, España.- "Los jóvenes representan casi la mitad de los nuevos infectados de sida: de las 2,7 millones de personas que contraen cada año el HIV, el 45 % tiene entre 15 y 24 años". Las declaraciones pertenecen a Thoraya Ahmed Obaid, directora ejecutiva del Fondo de Población de Naciones Unidas, que fue entrevistada por el diario español "El País".
La mujer, una de las asistentes a la XVII Conferencia Internacional sobre Sida, que se realiza en México, señaló que -tres décadas después de que se descubriera la enfermedad- los grupos más vulnerables al virus son las mujeres y los adolescentes.
"En todo el mundo, se estima que hay 5,5 millones de jóvenes infectados. Están indefensos porque les falta información: a fines de 2007 sólo el 40 % de ellos tenían un amplio conocimiento de lo que es el HIV", explicó la funcionaria.
Avances en la prevención
En la Conferencia, que tiene lugar desde el domingo, 22.000 especialistas y delegados buscan establecer una agenda para atender problemas como la falta de profesionales sanitarios que enfrenten la pandemia que sufren 33 millones de personas en todo el mundo. "Hay escasez de médicos y enfermeras para atender a los enfermos, especialmente en el sur de Africa", manifestó ayer, en el primer día de sesiones, la organización no gubernamental Médicos sin Frontera.
Los expertos consideraron crucial que gobiernos y donantes realicen acciones inmediatas para aumentar el número de trabajadores de la salud destinados a combatir esta pandemia, ya que sólo el 31 % de los afectados recibe el tratamiento adecuado.
Datos de Naciones Unidas indican que en 2007 hubo 2,1 millones de muertes causadas por este flagelo -desde los inicios murieron 25 millones- y que, en ese año, sólo recibieron tratamiento tres millones, que era la cifra estimada para 2005.
No obstante, el organismo internacional señaló que en los dos últimos años hubo más avances en la prevención del sida que en las dos décadas pasadas. Al respecto, especialistas de México, Gran Bretaña y Uganda dijeron que la epidemia sigue en ascenso, pero que su ritmo de crecimiento se redujo.
Acceso universal
En la primera jornada de la Conferencia también se destacó la ponencia del ex presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, que recomendó cambios legales, para expandir el campo de acción de las organizaciones no gubernamentales.
Otra denuncia, sobre "las tácticas agresivas de las multinacionales farmacéuticas", partió de la cantante británica Annie Lennox, embajadora de Oxfan, organización que lucha contra la escasez de alimentos. La artista afirmó que las acciones de los productores de medicamentos tornan inalcanzables los remedios para los habitantes de países pobres.
Para Lennox, el compromiso asumido en 2005 por el G8, que reúne a los ocho países más industrializados, destinado a facilitar el acceso universal a los tratamientos del sida para 2010, parece difícil de conseguir, "porque la fecha está a la vuelta de la esquina".
Por último, representantes de empresas multinacionales radicadas en México anunciaron acciones de información y educación sobre el sida para sus trabajadores y la eliminación del, hasta ahora, obligatorio examen de HIV para obtener un empleo. (Télam-Especial)
La mujer, una de las asistentes a la XVII Conferencia Internacional sobre Sida, que se realiza en México, señaló que -tres décadas después de que se descubriera la enfermedad- los grupos más vulnerables al virus son las mujeres y los adolescentes.
"En todo el mundo, se estima que hay 5,5 millones de jóvenes infectados. Están indefensos porque les falta información: a fines de 2007 sólo el 40 % de ellos tenían un amplio conocimiento de lo que es el HIV", explicó la funcionaria.
Avances en la prevención
En la Conferencia, que tiene lugar desde el domingo, 22.000 especialistas y delegados buscan establecer una agenda para atender problemas como la falta de profesionales sanitarios que enfrenten la pandemia que sufren 33 millones de personas en todo el mundo. "Hay escasez de médicos y enfermeras para atender a los enfermos, especialmente en el sur de Africa", manifestó ayer, en el primer día de sesiones, la organización no gubernamental Médicos sin Frontera.
Los expertos consideraron crucial que gobiernos y donantes realicen acciones inmediatas para aumentar el número de trabajadores de la salud destinados a combatir esta pandemia, ya que sólo el 31 % de los afectados recibe el tratamiento adecuado.
Datos de Naciones Unidas indican que en 2007 hubo 2,1 millones de muertes causadas por este flagelo -desde los inicios murieron 25 millones- y que, en ese año, sólo recibieron tratamiento tres millones, que era la cifra estimada para 2005.
No obstante, el organismo internacional señaló que en los dos últimos años hubo más avances en la prevención del sida que en las dos décadas pasadas. Al respecto, especialistas de México, Gran Bretaña y Uganda dijeron que la epidemia sigue en ascenso, pero que su ritmo de crecimiento se redujo.
Acceso universal
En la primera jornada de la Conferencia también se destacó la ponencia del ex presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, que recomendó cambios legales, para expandir el campo de acción de las organizaciones no gubernamentales.
Otra denuncia, sobre "las tácticas agresivas de las multinacionales farmacéuticas", partió de la cantante británica Annie Lennox, embajadora de Oxfan, organización que lucha contra la escasez de alimentos. La artista afirmó que las acciones de los productores de medicamentos tornan inalcanzables los remedios para los habitantes de países pobres.
Para Lennox, el compromiso asumido en 2005 por el G8, que reúne a los ocho países más industrializados, destinado a facilitar el acceso universal a los tratamientos del sida para 2010, parece difícil de conseguir, "porque la fecha está a la vuelta de la esquina".
Por último, representantes de empresas multinacionales radicadas en México anunciaron acciones de información y educación sobre el sida para sus trabajadores y la eliminación del, hasta ahora, obligatorio examen de HIV para obtener un empleo. (Télam-Especial)
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