Críticas al G8 por la crisis alimentaria

Críticas al G8 por la crisis alimentaria

Sombrío panorama por el alza de los precios.

APOYO. El francés Sarkozy ayuda a Lula a ubicarse para la foto de familia. REUTER APOYO. El francés Sarkozy ayuda a Lula a ubicarse para la foto de familia. REUTER
10 Julio 2008
TOYAKO, Japón.- Los países emergentes nucleados en el Grupo de los Cinco (G5), China, India, Brasil, México y Sudáfrica, manifestaron su preocupación por la crisis alimentaria mundial en una reunión con sus pares del G8 (EEUU, Reino Unido, Alemania, Japón, Canadá, Francia, Italia y Rusia), en la última jornada de la cumbre de los ocho países más industrializados celebrada en la ciudad japonesa de Toyako.
El presidente de México, Felipe Calderón, coordinador del encuentro, afirmó que la conversación giró en torno del alza de los precios y de los alimentos, y sobre el impacto que causa en las economías de los países emergentes.

Lula denuncia especulación
Por su parte, el mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, atribuyó la espiral alcista del precio de los alimentos a maniobras especulativas con las cotizaciones de contratos a futuro de las materias primas.
Lula sugirió una investigación de la FAO, la organización de la ONU para la alimentación y la agricultura, al respecto. “Creo necesario que tengamos no apenas un discurso común, sino un diagnóstico común de lo que está ocurriendo en el mundo de los alimentos”, dijo. Asimismo, insistió en negar que los biocombustibles, salvo los originarios del maíz, sean causantes de este fenómeno.
Durante el encuentro, los líderes del G5 destacaron que la crisis alimentaria afecta a todas las naciones del mundo, pero no a todas por igual, ya que en los países en desarrollo o emergentes vive la mayor cantidad de gente pobre.
Entre los factores que incidieron en esta crisis, destacaron el exceso de demanda por el crecimiento de muchas economías, los subsidios al agro de los países desarrollados, el uso de granos comestibles en la producción de etanol y de otros biocombustibles -como el maíz en el caso de EEUU-, y el factor especulativo.
En ese sentido, urgieron al FMI, al BM y a la Unión Europea a corregir esta situación. Asimismo, sugirieron la creación de un programa internacional que permita compensar con ingreso la pérdida de poder adquisitivo de las familias más pobres debido al alza en los precios de los alimentos, basado en transferencias directas a la población mundial en estado de pobreza extrema. (Reuter)

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