Ciccolini: “Desde que llegué estoy feliz, disfrutando otra vez del fútbol”

A cada paso Leandro Ciccolini regala sonrisas. Se nota que está feliz; que tomó el arribo a San Martín como un paso importante en su carrera. “Desde que llegué me sentí muy cómodo, muy contento. No me venía sintiendo así porque en los últimos días en Central Córdoba, ya teniendo la chance de venir acá, me costaba un poco el día a día. Acá es todo lo contrario; estoy siempre de buen humor, feliz, disfrutando nuevamente del fútbol”, confiesa en diálogo con LA GACETA, recién llegado a Buenos Aires, en el hotel ubicado en la zona de Retiro.

Ayer, alrededor de las 11, Franco Ghiani, gerente del departamento fútbol, recibió la noticia de que Ciccolini había quedado habilitado para debutar. Y esa fue la frutilla del postre para una semana casi perfecta en la que se sumó al grupo, trabajó sin problemas, volvió a sentir el cosquilleo previo a cada partido y pinta como posibilidad para jugar de movida esta tarde en Floresta.

Brian Andrada, su amigo en Gimnasia de Mendoza, fue casi un gestor para su llegada. “Enano” también fue el que medió con el grupo y lo adaptó casi de un día para el otro. “Brian es el más rompehielos, el más jodón. Es mi amigo y se puso muy contento cuando le dije que venía. Siguió las negociaciones todo el tiempo, me decía que arreglara rápido y sin dudarlo porque San Martín es un gran club; porque hay un proyecto serio, grandes jugadores y un cuerpo técnico que trabaja muy bien. Él me facilitó la adaptación y hoy estoy feliz”, avisa Ciccolini, enfocado en sólo una cosa: el ascenso a la Liga Profesional. “Es el objetivo de todos. Acá debemos terminar primeros, jugar la final y ascender. No hay margen para otra cosa”, agrega.

En pocos días caminó la ciudad y fue cosechando fuerzas y apoyo. Los hinchas, cuando lo reconocían, le pedían fotos, lo alentaban a ir por todo y hasta se ofrecían como ayuda y sostén. “La pasión del hincha de San Martín es increíble; se siente en todos lados. Pero hay una cosa que nadie dice y que es tremenda. Son muy solidarios, están listos para darte una mano con cualquier cosa. Y cuando uno llega a una ciudad nueva es importante sentirse querido, contenido; porque eso te ayuda también en lo futbolístico. No tengo palabras para describir lo que viví esta semana”, remarca, antes de advertir que es casi un enamorado de Tucumán. “Cuando estaba en Santiago venía de paseo. Conocí Tafí del Valle y es bello. En estos días, con mi pareja, caminamos por el centro, por Yerba Buena y nos gustó mucho. Estoy feliz de haber elegido seguir mi carrera en este club”, destaca.

Fue una de las primeras opciones que había pedido Pablo Frontini. Por eso, el entrenador ya lo piensa como titular. Ciccolini está listo para saltar a escena, aunque desde el cuerpo técnico advierten que, quizás, no pueda completar los 90 minutos. “Trabajó muy bien a la par del grupo. Hay una posibilidad de que juegue como titular; pero recién definiré el equipo en la charla técnica”, avisa el entrenador.

Que “Cicco” no piense en lo que puede suceder esta tarde en Floresta es algo imposible. Afirma que se imagina debutando y esperando que todo salga de la mejor manera. Pero al toque intenta bajar un poco la ansiedad. “Trato de estar tranquilo porque si no, es peor -afirma-. Me siento bien y en condiciones de jugar; pero acá hay mucha y muy buena competencia”.

No tiene problemas en jugar por las dos bandas. Se lo dijo al DT, de quien espera también cosas positivas. “Cuando charlé con él me di cuenta de que vemos el fútbol de una manera muy parecida. Además, tiene la idea de que hay momentos en los que debo cerrarme para generarles espacios a otros compañeros. Creo que él puede potenciarme como jugador”, advierte Ciccolini, el enamorado de Tucumán, del club y de los hinchas “santos”. Un amor que fue casi a primera vista.