Atlético Tucumán: “No puedo hablar”, dijo Espinoza

Atlético Tucumán: “No puedo hablar”, dijo Espinoza

El club se ofreció a reparar los daños ocasionados fuera del estadio al auto de un familiar del cuarto árbitro, Federico Guaymás

INSEGURIDAD. El vehículo de un familiar de Guaymás fue dañado mientras estaba estacionado en Chile y avenida Siria.  INSEGURIDAD. El vehículo de un familiar de Guaymás fue dañado mientras estaba estacionado en Chile y avenida Siria.

El 3-1 de San Lorenzo sobre Atlético no hizo más que sembrar fastidio en un “decano” que venía con algunas dudas en el plano deportivo, aunque por el momento esta situación parece haber quedado de lado.

En el club están preocupados. La tabla general y los promedios quedaron al margen por unas horas y el foco dirigencial estuvo puesto en todo lo acontecido en torno al polémico arbitraje de Fernando Espinoza.

El domingo de Pascuas empezó convulsionado en 25 de Mayo y Chile. Si bien la derrota se consumó cerca de las 22.30, las puertas del estadio recién se cerraron a las 2.30 de la madrugada.

“Cerca de la medianoche volvieron al estadio uno de los asistentes de Espinoza (Federico Cano) y el cuarto árbitro (Federico Guaymás). Contaron que habían encontrado roto el vidrio del auto de un familiar de Guaymás que estaba estacionado sobre calle Chile, entre Junín y avenida Siria”, señaló Ángel Saba, encargado de la seguridad en el “José Fierro”. Él fue el último en retirarse del club.

Cuando Cano y Guaymás llegaron al estadio escoltados por la Policía fueron recibidos por Mario Leito, presidente del club, y por Saba. Pese a que no les correspondía (el hecho delictivo se produjo fuera del estadio y del anillo de seguridad en las afueras) la dirigencia de Atlético se ofreció a reparar los daños del vehículo y pusió a disposición las instalaciones para que guardaran el auto allí hasta la reparación. Los árbitros aceptaron la ayuda, pero nunca regresaron ni se comunicaron con alguien del club.

La actitud no cayó para nada bien, sobre todo cuando algunos medios nacionales publicaron que el auto era de Espinoza y que el referí había sido agredido y que pensaba denunciar penalmente al club por los daños materiales.

LA GACETA se comunicó con Espinoza, pero el árbitro mendocino sostuvo que no está autorizados a brindar declaraciones a los medios de comunicación y confirmó que ya estaba fuera de la provincia.

“Uno de los árbitros tiene uno de los hijos enfermos y son de la zona (Guaymás de Salta y Cano de Catamarca), entonces pidieron permiso para que un allegado los busque. Llegaron en cuatro autos con familiares, todos ingresaron a la cancha y los autos estuvieron dentro del estadio. En el entretiempo, entendiendo que el partido estaba bravo, me pidieron que abra la puerta del estadio porque querían llevar los autos a un lugar más seguro, pero nosotros no sabíamos dónde los iban a estacionar”, remarcó el jefe de seguridad.

En horas de la tarde, el club emitió un comunicado oficial con dos pedidos para la Liga Profesional. Que Espinoza no sea designado nuevamente para arbitrar los partidos de Atlético ni de sus rivales directos en los objetivos deportivos. Y que se presente la documentación pertinente que demuestre que Espinoza se encuentra en condiciones psicológicas de desempeñarse como árbitro de fútbol.

Está previsto que el presidente Leito acompañe a la delegación en el viaje a Buenos Aires esta semana y mantenga reuniones con las autoridades de la Liga.

La Reserva recibe a Estudiantes en el estadio  

Gustavo Lescano; Luis Cardozo, Thiago Sale (clase 2004, debuta), Rodrigo Morales y Alvaro Medina; Omar Romano, César Vega, Joaquín Ávila e Ignacio Cuello; Maximiliano Alanis y Kevin Isa Luna, son los 11 elegidos por Martín Anastacio para recibir a Estudiantes desde las 19 en el Monumental, en el inicio de la undécima fecha del torneo de Reserva. El “decano” viene de sumar en las últimas dos fechas (2 a 1 a Colón y el empate 2 a 2 ante San Lorenzo) y tienen 10 puntos. En tanto que el “pincha” reúne 16 unidades y viene de perder 1-0 con Independiente.

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