En Tucumán, los ambulantes rezan por el éxito de la selección de Scaloni

En Tucumán, los ambulantes rezan por el éxito de la selección de Scaloni

La capital -y el resto de la provincia- se tiñó de celeste y blanco por la venta de productos para alentar.

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Los mundiales son acontecimientos extraordinarios capaces de generar satisfacciones en todos los sentidos. Desde el aspecto emocional hasta lo económico. Puede sonar raro, pero las principales acciones del torneo que se llevan a cabo en Qatar, a más de 14.000 kilómetros de distancia de Tucumán, pero los vendedores ambulantes de nuestra provincia disfrutan a su modo la llegada del torneo más importante en el ámbito del fútbol.

Las calles de nuestra ciudad poco a poco se van tiñendo de celeste y blanco, no porque todos los vecinos se hayan puesto de acuerdo en adornar sus hogares, sino porque cada esquina se convierte en una especie de shopping a cielo abierto que les abre sus puertas a los fanáticos de la Selección.

De esta manera, camisetas, gorras, pilusos, cornetas, vuvuzelas, banderas y todo tipo de cotillón está al alcance de la mano de todos, en un semáforo, en una compra sin largas filas ni esperas prolongadas.

Maricel Medina, en la esquina de las avenidas Sarmiento y Siria, ofrece camisetas de la Selección con un precio de $2.000 (talles 0 al 16) y a $3.000 (talle S a XXL). “Son bordadas y de muy buena calidad, la versión para niños es la que más salida tiene”, reconoce la vendedora que se ubica en esa esquina desde las 9 hasta las 19. “La versión alternativa morada te sale $3.000 en talles para adultos, los pilusos $1.500 y las gorras $1000”, agregó la comerciante que también tiene en stock vuvuzelas ($500 y $1.000) y cornetas ($500).

La preparación de la mercadería es clave, en ese sentido todos los comerciantes explicaron que desde hace meses comenzaron a juntar el stock para ganarle a la inflación y claro, a medida que se acerca la fecha del debut del seleccionado de Lionel Scaloni la demanda va creciendo. “En estos días aumentó muchísimo la venta, es increíble, las camisetas de niños son las más pedidas”, remarcó Augusto, que tiene su puesto improvisado entre la parada de ómnibus de la línea 18 y un árbol, sobre avenida Sarmiento (entre Maipú y Junín). Los precios de las camisetas en todos los casos son similares, varían según los talles, pero siempre entre los $2.000 y los $3.000.

En Tucumán, los ambulantes rezan por el éxito de la selección de Scaloni

Juan Carlos se ubica en la vereda de la iglesia La Merced, sobre 24 de septiembre. Allí se pueden adquirir camisetas para niños, globos, pelucas y pinturas para el pelo. “La pintura sale $350 es en aerosol y se pueden pintar varias personas, es al agua”, aclaró. El emprendedor está ubicado en esa esquina desde hace varias semanas y se instala alrededor de las 8.30 hasta las 21.

Para Juan, apostado en Maipú y Sarmiento, el fútbol siempre apareció como una segunda fuente de ingresos para su hogar. “Siempre me paro aquí cuando hay partidos de Atlético, cuando juega San Martín también voy a La Ciudadela, pero en los certámenes cuando juega Argentina generalmente se vende más”, relata uno de los vendedores callejeros que más stockeado está. “Ahora con este calor la gente se lleva muchas gorras ($1000 y $1500), te diría que es lo que más está saliendo”, remarcó el vendedor. Las banderas en este caso salen $1500 (1,5 metros por 75 centímetros). 

“Yo a las 6.30 el martes ya estaré aquí”, advirtiendo que va a resignar ver el debut mundialista de la “Scaloneta” por la venta. “Algo espiaré desde aquí (al frente hay un bar con televisores al aire libre) y sino por radio… pasa que si Argentina gana todos saldrán contentos a sus trabajos y ya tengo que estar instalado para no perder esas ventas”, comentó el cuentapropista de 61 años.

“Tenemos buen equipo, pero las selecciones están muy bien formadas, hay que tener cuidado. A medida que vaya superando fases, la gente se entusiasma”, remarcó Juan antes de comentar una realidad que era esperable: “ya no es como otros mundiales que la gente venía y se llevaba una camiseta, un gorrito y otras cositas, ahora vienen y eligen algo, si un papá o mamá trae un niño, solo le compran para ellos. La crisis económica golpeó a todos”, reflexionó el ambulante que desde hace 20 años se dedica a esta actividad.

Está claro que, si Argentina empieza el Mundial de Qatar con el pie derecho, la “fiebre mundialista” repercutirá también en la venta callejera. Ellos están listos para cumplir con la demanda de los peatones, esperando que la “Scaloneta” se quede con el trofeo para alegrar el corazón y mejorar sus economías. Más de 13.000 kilómetros hay de distancia entre Doha y San Miguel de Tucumán, si allá son felices, aquí también lo serán. Los goles y gambetas de Lionel Messi y compañía valen oro para los que aspiran a vender más.

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