25 Junio 2022
EN AVENIDA MATE DE LUNA AL 3000. La motocicleta, tras ser embestida por el Fiat Palio Adventure. Fotos: Tránsito SMT / Google Maps
Un hombre en motocicleta sufrió lesiones luego de haber sido embestido este sábado por la mañana por un automovilista en avenida Mate de Luna al 3.000. El conductor del Fiat Palio Adventure se encontraba en evidente estado de ebriedad, por lo que, una vez que sea identificado de manera formal, se inhabilitará su carné de manejo durante los próximos cinco años, anticipó el subsecretario de Tránsito de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán, Enrique Romero.
El hecho se registró cerca de las 7, detalló el funcionario municipal. El auto, que se desplazaba de oeste a este, "luego de 'cordonear' la platabanda, se incrustó en la parte trasera de una moto", describió Romero.
El motociclista "resultó con heridas en la cabeza" y "traumatismos en su pierna izquierda y en la cadera". "Felizmente, conducía con el casco colocado", acotó.
Detrás del Fiat, explicó, se trasladaba en un taxi la inspectora de Tránsito, Rosa Brito, "quien se bajó y tomó intervención en el procedimiento, comunicándose con el radio operador del municipio para que llame al 107" y al propio subsecretario de la repartición.
Romero detalló que el conductor, de unos 40 años, descendió del rodado "en evidente estado de ebriedad, balbuceando y con el pantalón desprendido". "Se niega a identificarse y a presentar la documentación pertinente, y le manifiesta a la inspectora que se había quedado dormido. En ese momento llega otro inspector de Tránsito, Carlos Ocampo, que se dirigía a cumplir con sus obligaciones y colabora con el procedimiento", agregó el funcionario.
El equipo del 107 prestó los primeros servicios de emergencia a la víctima, con el apoyo de una agente de Policía. Sin embargo, explicó Romero, el "conductor del vehículo procedió a darse a la fuga, sin importarle el estado de salud del motociclista, y casi embiste a la policía". "Una vez identificado, procederemos a inhabilitar su licencia de conducir por cinco años", añadió.
"Los tarados que insisten en beber y conducir anteponen el alcohol al carro fúnebre, y no solo hay que inhabilitarlos para conducir, sino meterlos en cana, aunque solo provoquen lesiones. Así entienden definitivamente que es mejor llegar sobrio y a la madrugada, que no llegar nunca o cometer un homicidio. Conducir ebrio es una enfermedad mortal", afirmó Enrique Romero.
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