Una pintura gigante vestirá el exterior de la sala Orestes Caviglia

Rojo. Verde. Amarillo. Rostros. Violín. Bandoneón. Contrabajo. Músicos. Misterio con antifaz. Gestos pictóricos que hidratan las artes. Exuberancia. Pincel sediento de almas. Mirada expresionista que se cuela por la vida, en el taller del pintor Donato Grima, que está en la etapa final de un mural que le ha encargado el presidente del Ente de Cultura de la Provincia, Martín Ruiz Torres, y será montado en el transcurso de este mes, en el exterior de la sala Orestes Caviglia, San Martín 251. “El mural tiene una narrativa casi secuencial y se lo utiliza normalmente en temas políticos, ideológicos si nos remitimos a los viejos muralistas. Con la evolución se transformó en otra expresión. Yo me incliné por hacer una pintura gigante; no tiene el tratamiento muralístico, que busca el impacto con brochazos grandes sin terminaciones o sea que va al impacto de la imagen solamente. En cambio, yo opté por lo pictórico, es decir que haya matices, las sutilezas de una pintura en una escala más chica. Por supuesto que en la distancia también tenés el tema de que hay que ajustar la escala a la pincelada. Si vos te acercas, ves que el trabajo tiene mucha materia, es una pintura gigante, tiene 8.40 metros de largo por 2.40 metros de alto”, comenta Grima.

- ¿Es la primera vez que abordás un mural con estas características? ¿Cómo te resulta la experiencia? ¿Qué es lo más difícil del trabajo?

- Sí, es la primera vez, es una experiencia muy enriquecedora, a los 72 años es difícil la manipulación de cada panel que pesa unos 50 kilos. La escala es distinta, pero como mi pintura es bastante temperamental, no he tenido conflicto en eso; a lo mejor, como soy de la pintura de caballete, hay vicios de esa pintura como ser estas sutilezas de las que te hablaba, que el muralista no las tiene porque va más al brochazo. Es enriquecedora porque veo las posibilidades de la pintura en tamaño grande. Es un poco más chica que el Guernica y más larga, porque el Guernica tiene 7.70 o 7.80 metros por 3.50 metros de alto. Lo que yo procuré es no caer en lo afichesco porque el mural tiene eso. La idea era hacer una simbiosis en imágenes del teatro, música y danza; a la plástica la descarto porque está implícita en el trabajo.

- Entre los personajes hay uno que puede reconocerse, pese a que está apenas bosquejado…

- Empecé a trabajar con los bocetos… por supuesto que esto tiene mucha carga mucha carga afectiva. No pienso en identificar a los personajes porque si no, caigo en la anécdota y es lo que no quiero. Lo referencial es lo que es la intimidad de mi trabajo en soledad; eso es yo te estoy contando, la intimidad del trabajo, pero no se puede explicar.

- ¿Qué significado tienen los trazos que se asemejan a firmas, pero que no lo son, y que acompañan tus pinturas de tu última etapa?

- Así como uno lee los autores que dicen cosas que uno querría decir y no lo sabe decir en ese lenguaje, entonces cada persona ve una de estas grafías y la completa desde su perspectiva cultural, intelectual, emocional. Esa grafía es el texto abstracto, es la palabra abstracta a la que el espectador le pone lo que él está pensando: son grafías, el espectador le pone el contenido. En 2018, estaba exponiendo en el Ateneo de Madrid, en España y cayó una delegación de lingüistas rusos. Estaban muy impresionados porque les explicaba esto. Es la manera de que el espectador se enganche también con su propia historia, que no caiga solamente en la imagen, entonces es la parte que además me interesa porque es un efecto inmediato.

- En el mural que estás haciendo está toda tu impronta, tus colores, sos vos. ¿Qué materiales estás empleando?

- Está hecho en acrílico, en algunos sectores tiene masilla de auto, la parte de texturas son masillas. Hago mucho hincapié en la edad porque gracias a Dios tengo buena salud, pero manipular esto… un poco que ya yo pensé siempre que la obra iba a estar tranquila. Me faltan dos paños que los tengo que plantear esta semana. Todo voy terminando en conjunto, porque, al principio, trabajaba individualmente por paneles, pero no tenés la mirada global, porque no son paneles sueltos, es un cuadro, es una obra, una pieza que se integra. Entonces trabajé por paneles, pero ya en estos días los uní, para ir viendo que encaje todo, porque una cabeza no puede quedar desfasada. Ahora me toca el armado e ir a la cosa fina.

- ¿Qué es el arte?

- El arte es todo lo que sos. ¿Qué habría sido de mi vida si no me hubiera ido de acá? El hecho de haberme ido me abrió fronteras. Y vos vas recopilando cosas a medida que vas avanzando, te vas encontrando con viejas palabras visuales, con viejos conflictos. Haciendo un racconto, siempre la temática ha sido sobre la condición humana. El conflicto humano nos involucra a todos. En la medida en que vos trabajas vas encontrando cosas o te vas poniendo tu propia identidad como artista.

La idea de esta pintura surge con el impacto de la covid-19 porque queríamos hacer algo, un reconocimiento al arte como un elemento transformador de la realidad. Ese es el origen, la síntesis de la idea y queríamos también, a través de esto, visibilizar el arte como ese elemento esencial dentro del desarrollo del ser humano, capaz de superar cualquier tipo de crisis, aún de la pandemia.

Ese es el origen de todo esto. Por eso este cuadro es la representación de todas las artes, de las letras, de la danza, de la música, de la plástica y por eso queríamos hacer ese homenaje a ese valor transformador. Queremos inaugurarlo antes del 31 de este mes. Ya están listos todos los soportes, así que termina Donato Grima y empezamos las tareas de colocación.

La obra es una explosión de colores, de ideas. Donato es un pintor que expresa cosas, muchas ideas cuando pinta. Esta obra es realmente la representación de todas las artes. Es mucho más fuerte que un mural, es un cuadro gigantesco, y la idea es que estando montado afuera del Caviglia es como llevar, sacar la cultura a la calle. Aparte del cuadro, vamos a poner un par de esculturas también en el acceso al Ente para que la persona que pase tenga un contacto directo con el arte, para que se sorprenda.

El arte como elemento transformador

Martín Ruiz Torres / Presidente del Ente Cultural de Tucumán

 * La idea surge en la pandemia porque queríamos hacer algo, un reconocimiento al arte como un elemento transformador de la realidad. Ese es el origen, la síntesis de la idea y queríamos también que a través de esto visibilizar también el arte como ese elemento esencial dentro del desarrollo del ser humano, capaz de superar cualquier tipo de crisis, aún de la pandemia. Ese es el origen de todo esto. Por eso este cuadro es la representación de todas las artes, de las letras, de la danza, de la música, de la plástica y por eso queríamos hacer ese homenaje a ese valor transformador. Queremos inaugurarlo antes del 31 de mayo. Ya están listos todos los soportes, así que termina Donato y empezamos las tareas de colocación.

* La obra es una explosión de colores, de ideas. Donato es un pintor que expresa cosas, muchas ideas cuando pinta. Esta obra es realmente la representación de todas las artes.  

* Esto es mucho más fuerte que un mural, es un cuadro gigantesco, la idea es que estando montado afuera del Caviglia, es como llevar, sacar  la cultura a la calle. Aparte del cuadro, vamos a poner un par de esculturas también en el acceso al Ente para que la persona que pase tenga en contacto directo con el arte, que se sorprenda.