Por Juan Manuel Montero
01 Mayo 2022
FOTO DE ARCHIVO / LA GACETA (DIEGO ARÁOZ)
Como si no hubiéramos tenido suficiente con todo lo que vivimos desde principios de 2020, la presencia del coronavirus a lo largo de dos años evitó que otros virus atacaran, pero con el debilitamiento de la covid, los otros reaparecieron con más fuerza. Es el caso de la gripe, por ejemplo. En el Instituto ANLIS Malbrán, una de las entidades científicas más reconocidas de Argentina, están detectando más de 370 casos por semana, y más de 1.100 virus de influenza detectados lo que demuestra la virulencia que la enfermedad está teniendo en una época en la que todavía no debería haber tantos casos.
Elsa Baumeister es la jefa del Servicio de Virosis Repiratorias del Malbrán. Por sus manos pasó el análisis, por ejemplo, del primer caso detectado de coronavirus en el país. Es una eminencia en su materia. “Teniendo en cuenta que el promedio antes de la pandemia era de 4.000 a 5.000 casos anuales estamos muy sorprendidos con tener esta cifra a esta altura del año”, señaló la especialista a LA GACETA. Este fue el diálogo:
- La pandemia nos dejó la sensación de que cualquier tos o estornudo ya es un virus. ¿Qué está pasando actualmente con enfermedades como la gripe? ¿Hubo un adelantamiento en la llegada?
- Este año, luego de dos años de pandemia, empezaron a circular los virus de la gripe con antelación, cuando la temporada regularmente es entre fines de mayo, junio y junio. Pero ya en diciembre empezaron a circular , sobre todo el serotipo ah3n2 del virus de la gripe. Actualmente hay mucha circulación, con muchos casos sintomáticos, con fiebre de 38° o más, lo que llamamos un síntoma constitucional, que es dolor de cuerpo y de las articulaciones además un síntoma respiratorio constante y decaimiento. Por suerte ya comenzó la vacunación ya que es importante tener protección.
- ¿Cuánto influyeron las condiciones de aislamiento que tuvimos en estos dos años para que aparecieran lo que parecen ser virus más fuertes?
- Cuando comenzó la pandemia en 2020 había una alta actividad de los virus de la gripe en el hemisferio norte, donde era invierno. Cuando empezó a circular el sars-covid 2, bajaron de manera abrupta. La verdad es que durante 2020 la detección fue escasa, y tuvo que ver porque empezaron el aislamiento social y las otras medidas, como los barbijos, que podían prevenir las otras infecciones. Además los chicos estaban en casa, ellos son vectores de los virus, pero no se contagiaban. En 2021 las medidas no fueron tan estrictas, y en otros países se comenzó a ver influenza en menor proporción, pero a fines de 2021 llegó la gripe al cono sur. La verdad es que me sorprendió la cantidad de casos que estamos teniendo. Los más afectados están siendo los más chicos, los menores de cinco años y sobre todo de dos, quienes prácticamente no han tenido contacto con el virus, lo que genera una población muy desprotegida en cuanto a lo inmunitario.
- Al igual que con la gripe, ¿vamos a tener que aprender a convivir con la covid?
- Hoy estamos en transición. Hay que entender que la pandemia no finalizó. Debemos pensar que el coronavirus puede formar parte del conjunto de virus respiratorios. Y como decimos nosotros, cuando las hojas comienzan a caerse es tiempo de virus respiratorios. Hay que cuidarse. Es muy importante seguir las recomendaciones sanitarias y es muy importante la vacunación. Hay que concurrir a los nodos de vacunación para continuar la inmunización.
- ¿Usted cree que el barbijo llegó para quedarse, como uno ve que pasa en oriente?
- Es una medida a la que hay que prestarle mucha atención. Nunca está de más usarlo, pero no quiero ser estricta en el concepto y decir que lo vamos a usar siempre. Si uno puede hay que usarlo, sobre todo en lugares cerrados, cuando no hay ventilación. Es una muy buena medida de prevención a la que yo le seguiría dando importancia.
- Ustedes diagnosticaron el primer caso de coronavirus en Argentina. ¿Qué significó eso?
- La verdad es que estábamos muy expectantes. No teníamos dudas de que iba a llegar alguna persona infectada desde el exterior, se tenía que producir la diseminación del virus por viajeros. Fue complicado cuando vimos el primer positivo, pero por suerte teníamos el laboratorios armado para estas situaciones y pudimos responder
- ¿Qué avances científicos le sorprendieron durante la pandemia?
- Lo de las vacunas fue impresionante. Pero también otro tipo de tratamientos, como los inmunosueros, o los anticuerpos específicos monoclonales y los antivirales, que se hicieron muy rápidamente. Con el trabajo científico durante la pandemia se sentaron bases para trabajar hacia el futuro con distintas enfermedades.
Para tener en cuenta:
¿Quiénes deben vacunarse contra la gripe? La vacuna forma parte del Calendario Nacional de Vacunación y es gratuita y obligatoria para los siguientes grupos:
– Personal de salud.
– Personas gestantes: en cada embarazo y en cualquier trimestre de la gestación.
– Personas puérperas: hasta el egreso de la maternidad (máximo 10 días), si no recibió la vacuna durante el embarazo.
– Niños y niñas de 6 a 24 meses de edad (son 2 dosis con 4 semanas de intervalo entre la primera y la segunda, si no recibió 2 dosis anteriormente).
– Personas entre los 2 y los 64 años que tengan factores de riesgo: deberán presentar una orden médica o documentación que certifique la existencia de enfermedades preexistentes. Son considerados factores de riesgo: obesidad, diabetes, enfermedades respiratorias, enfermedades cardíacas, inmunodeficiencias congénitas o adquiridas, enfermedad oncohematológica, trasplante y/o personas con insuficiencia renal crónica en diálisis, entre otros.
Personas de 65 años y mayores.
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