Rusia se justifica por la escalada de combates en Donbass

“Las provocaciones de las fuerzas de seguridad ucranianas estaban detrás de la escalada”, dijo Putin al presidente de Francia a través de una llamada telefónica.

El domingo pasado el presidente ruso, Vladimir Putin, sostuvo una conversación telefónica con su par francés, Emmanuel Macron. Afirmó que la escalada de combates entre el Ejército ucraniano y milicias separatistas rusoparlantes que se dio en el este de Ucrania -zona fronteriza con Rusia, conocida como Donbass-, fue causada por “provocaciones” del gobierno ucraniano.

Asimismo, aseguró querer “intensificar” los esfuerzos diplomáticos para poder resolver el conflicto en Donbass, el cual se agravó en las últimas 72 horas y dejó más de 14.000 muertos en los últimos ocho años.

Putin reiteró a Macron su exhortación a que Estados Unidos y la OTAN “se tomen en serio las demandas rusas de garantías de seguridad y respondan a ellas de forma concreta y sustancial”.

Por su parte, Rusia, acusada de concentrar 150.000 soldados en las fronteras de Ucrania para preparar una invasión, exige la promesa de que este país nunca se una a la OTAN. Además, solicita el fin de la presencia militar de la alianza en sus fronteras ya que asegura que se trata de una amenaza a su seguridad.

Por otro lado, en esa charla el presidente ruso “expresó la seria preocupación por el fuerte deterioro de la situación en la línea de contacto en Donbass”, según informó el Kremlin en un comunicado.

En los últimos días, la tensión aumentó particularmente en el este de Ucrania, donde el sábado pasado las fuerzas gubernamentales y los separatistas prorrusos volvieron a acusarse de nuevos ataques y de violar el alto el fuego en las regiones de Donetsk y Lugansk.

Kiev informó la muerte de dos soldados “como consecuencia de un bombardeo”, pero indicó que sus fuerzas armadas “controlan la situación y continúan llevando a cabo su misión de rechazar y contener la agresión armada de la Federación Rusa”.

Por su parte, los líderes de las regiones separatistas de Donetsk y Lugansk, donde se encuentra la línea de frente que divide a Ucrania, ordenaron la movilización general, tras anunciar la evacuación de civiles.

Durante las últimas horas más de 10.000 personas cruzaron la frontera con Rusia, según lo informado por la agencia de noticias Sputnik.

Las milicias rusoparlantes se alzaron en armas en 2014 luego de que el entonces Gobierno ucraniano, afín a Rusia, fuera derrocado por una ola de protestas y sustituido por el actual, que es fuertemente antirruso.

Con control de las provincias de Donetsk y Lugansk, esas fuerzas denunciaron que el Gobierno ucraniano discrimina a la población rusoparlante del Donbass y es considerada como una amenaza para ella.

En 2015, en la capital de Bielorrusia, Ucrania y Rusia firmaron un acuerdo mediado por Francia y Alemania para tratar de poner fin al conflicto, por el que Moscú ratificó que esas dos provincias son parte de Ucrania y que logró detener los combates a gra escala.

Sin embargo, Ucrania no ha cumplido la parte política del acuerdo, que la obliga a dar autonomía a ambas provincias y a amnistiar a los rebeldes, pese a las acusaciones de Rusia y a las exhortaciones de Francia.

Por su parte, Putin le comunicó a Macron que las entregas occidentales de armas y municiones modernas a las fuerzas ucranianas estaban "empujando a Kiev hacia una solución militar" en el conflicto en el Donbass en violación de los Acuerdos de Minsk. "Ucrania se niega obstinadamente a aplicar los acuerdos de Minsk", aseguró el madatario ruso.

"Dada la urgencia de la situación, los presidentes acordaron que era conveniente intensificar la búsqueda de soluciones por la vía diplomática", dijo el Kremlin, con el objetivo de "facilitar el restablecimiento del alto el fuego y asegurar el progreso en la resolución del conflicto."

Mientras tanto, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, advirtió a Rusia que se enfrentará a costos económicos “sin precedentes” si decide finalmente atacar Ucrania, provocando sanciones “rápidas, severas y solidarias” contra individuos, instituciones e industrias clave del país. (Télam)