El crimen de Dominé: “El nuevo código está fallando con nosotros”

El crimen de Dominé: “El nuevo código está fallando con nosotros”

El hijo de la Ana Dominé, Nicolás Quesada, se quejó por la demora del inicio del juicio. Piensan hacer una marcha.

ESPERANDO EL FALLO. Seis de los siete acusados y dos defensores en un momento de la audiencia donde le prorrogaron las preventivas. ESPERANDO EL FALLO. Seis de los siete acusados y dos defensores en un momento de la audiencia donde le prorrogaron las preventivas.
Por Santiago Re y Gustavo Rodríguez 23 Octubre 2021

“Está totalmente demorado todo. Se suponía que en seis meses estaría terminada la investigación y con eso quedaba todo listo para que se inicie el juicio, pero ya pasó más de un año”, lamentó Nicolás Quesada, el hijo de la comerciante Ana Dominé, que fue asesinada el 12 de septiembre de 2020 por una banda de asaltantes en la esquina de avenida Alem y Crisóstomo Álvarez.

Esa fatídica noche, Dominé y su hijo Lucas Quesada cerraron su comercio de La Madrid al 1.100 a las 22 y emprendieron la vuelta a casa a bordo de una camioneta Toyota Hilux. En esa esquina se detuvieron para hacer una compra en un quiosco y fue entonces que dos hombres armados rompieron el vidrio de la puerta de acompañante y, tras forcejear con la víctima, le dispararon en la cabeza para arrebatarle la cartera.

Para el fiscal Carlos Sale, los autores fueron Federico “Loco” Sánchez y Raúl “Pety” Godoy (sería quien disparó). Además de ellos, llegarán a juicio acusados de haber tenido participación en el hecho Antonio Greco, Edgar Visuara, Exequiel Antonio Tous, Sebastián “Hormiga” Quiroga y Braian “Hijo de Zenón” Leguizamón, el único que siguió el proceso en libertad.

El 3 de agosto, el juez Rafael Macoritto dio por cerrada la investigación y aceptó que se desarrolle el juicio. Pero han pasado más de dos meses y aún no comenzó. Ayer se confirmó que el tribunal estará integrado por Fanny Suriani, Diego Lammoglia y Dante Ibáñez. Pero el debate, que duraría al menos un mes, no tiene fecha de inicio. Los más optimistas señalan que será después de la feria de enero.

Proceso interminable

“Todo se demora un montón y así se van venciendo las prisiones preventivas. Todos los meses tenemos una nueva audiencia en la que hay que pelear para que les renueven la preventiva a los acusados, porque hay que justificar el pedido de la extensión y ya no estamos en una etapa de prueba, ya todas las pruebas fueron ofrecidas a juicio”, señaló Quesada.

“Todos los meses hay una audiencia nueva, y así seguiremos hasta que un día nos toque un juez que no quiera prorrogar la prisión. Nos preocupan dos cosas: ya se viene la feria y aún no nos dieron la fecha del juicio. Si la idea del nuevo código era traer celeridad a los procesos, entonces con nosotros están fallando. Lo segundo que nos da temor es que si un condenado como (Roberto) Rejas se fugó imagínense si no se va a fugar alguien que aún goza del beneficio de la duda, porque aún no fue juzgado”, remarcó el joven. Luego agregó: “fijando la fecha se friza todo, ya no los liberarían porque hay una expectativa de pena muy alta se sabe que pueden llegar a recibir perpetua”.

Quesada indicó que ver la cantidad de fugas que se vienen registrando en los últimos años en la provincia es algo terrible para las familias de las víctimas. “Te dan ganas de bajar los brazos, sentís que todo el esfuerzo que uno hace es en vano, porque para nosotros ahora es dividir la vida entre el trabajo y el seguimiento de la causa. A pesar de todo eso seguimos apostando a llegar al final de todo esto, y conseguir justicia para mi mamá”, describió.

Nada cambió

Quesada puntualizó que el hecho no sólo dejó secuelas, sino que nada cambió después del crimen. No se reforzó la zona. “Mi hermano Lucas no puede hablar del tema. Él vio de frente cuando le disparaban a mamá. Yo trato de poner el pecho para que podamos terminar este camino”, contó.

“En la cuadra del negocio asaltaron en dos locales más este mes. Cada vez que paso por esa esquina de mierda (Alem y Crisóstomo) veo que sigue liberada, no hay un policía. Pero eso no es todo… Hace ocho años a mi papá lo atropellaron y mataron en Ejército del Norte y Crisóstomo, no había cámaras en esa esquina. El año pasado mataron a mi mamá en otra avenida y tampoco había cámaras. Hoy sigue sin haber cámaras de seguridad o bien no andan. Nada cambia para bien”, analizó el joven.

Por último, adelantó que pronto realizarán nuevas manifestaciones para exigir que se fije fecha de juicio. “La gente nos apoyó mucho, los clientes hasta el día de hoy preguntan cómo va el caso y yo les digo la verdad: si no es por la visibilidad que nos dio el diario y la televisión esto avanzaría aún más lento”, concluyó.

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