22 Octubre 2021
“HAY QUE SER PACIENTES”. El querellante José Luis Robles.
“Ahora la defensa de los Caro pidió lisa y llanamente que les devuelvan la libertad, y en cierto modo se les otorgó lo que pedían, pero se trata de una libertad ‘controlada’, llamémosle. No pueden salir de la provincia sin autorización judicial, tienen prohibida la tenencia de armas, sus movimientos estarán controlados por una tobillera electrónica y deberán firmar tres veces por semana el libro de comparecencias en una comisaría”, explicó el abogado José Luis Robles, que lleva adelante la querella de las víctimas de la galería Mendoza.
En junio cuatro delincuentes irrumpieron por los techos del paseo de compras y desvalijaron al menos cinco locales. La pérdida total fue millonaria. Por este hecho fueron detenidos los hermanos Walter “Kuki” y Cristian “Bichi” Caro. El lunes, tras cuatro meses de arresto, los principales acusados del robo, recuperaron su libertad (ver detalles en nota central).
El proceso sigue
“No descartemos que en cualquier momento puede aparecer una evidencia clave. Incluso esa evidencia puede ya tenerla la Fiscalía, pero hay que ser prudentes y esperar el momento para darla a conocer porque si no se puede estropear el proceso”, agregó el profesional en entrevista con LA GACETA.
Robles reconoció que el cese de la prisión preventiva no fue bien vista por sus representados. “Para las víctimas sin duda que no es algo grato esta noticia, porque gran parte de la sociedad entiende esto como que se les dio una libertad absoluta a los acusados y que ya se desligaron de todo, pero no es así. Debemos entender que la prisión preventiva es una medida provisoria. Sirve para realizar las pericias que quizás no podrían hacerse estando los acusados en libertad, porque podrían obstaculizarlas. Pero tampoco podemos hacer de esa medida una condena anticipada. La gente está dolida, pero hay que entender que así es el proceso”.
Sobre la pesquisa sostuvo que siguen adelante las medidas del Ministerio Público Fiscal, solicitadas por el fiscal Pedro Gallo de la unidad de Robos y Hurtos II y que en simultáneo la querella lleva una investigación paralela. En ese sentido, explicó: “hay versiones de que pudo haber políticos y policías involucrados. Nada se descarta por ahora. Tampoco hubo ningún tipo de acercamiento para intentar llegar a un arreglo, lo cual reitero, como ya dije en otra entrevista: eso es lo que más le gustaría a las víctimas, recuperar lo que les robaron; pero eso no dependerá sólo de las partes interesadas sino también de que la Fiscalía nos permita poder acordar algo”.
Finalmente, Robles añadió que la pesquisa se extiende porque la banda tendría nexos con otras agrupaciones que también son investigadas.
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